Senadores estadounidenses criticaron los ataques contra altos funcionarios del país por parte del presidente Nayib Bukele. Los cuestionamientos al presidente centroamericano se dieron durante la comparecencia en el Senador del próximo embajador de Estados Unidos en El Salvador, William Duncan.
El senador demócrata Robert Menéndez y el republicano Marco Rubio manifestaron su preocupación ante las agresiones del presidente de El Salvador contra la congresista demócrata Norma Torres y la exembajadora Jean Manes.
Según Menéndez, Bukele utilizó su “red de troles” para agredir a las personas que critican su administración y a las funcionarias del gobierno de Joe Biden. “Es increíble lo que está haciendo” en contra de ellas, expresó. El senador le preguntó a Duncan si se compromete a priorizar estos temas en sus discusiones con Bukele.
En esa misma línea, Rubio aseguró que Bukele se ha burlado del gobierno estadounidense, pero, por otro lado, se lo ve negociando con el Fondo Monetario Internacional (FMI), cuyo mayor accionista es Estados Unidos. “Parece que nuestra administración mantiene abierta la posibilidad de que todavía haya un acuerdo”, señaló.
Duncan dijo que estos ataques son "absolutamente inaceptables" y aseguró que está dispuesto a manifestar el descontento estadounidense ante el gobierno salvadoreño, en el caso de que sea designado en el cargo diplomático.
“Tenemos que acercarnos al pueblo salvadoreño como deberíamos hacer con la mayoría de los gobiernos, desde una posición de respeto”, afirmó el próximo embajador. Además, mencionó que hay que reconocer que ellos eligen a sus líderes.
“Parece que en este momento el presidente es muy popular y esa es una realidad que debemos conocer”, sostuvo Duncan. “Sin embargo, creo que también es cierto que ha habido ciertos desarrollos en El Salvador que no parecen conducir al fortalecimiento de la democracia en ese país”, añadió.
Con respecto a las negociaciones con el FMI, el diplomático dijo que no está al tanto de en qué punto del acuerdo se encuentran exactamente. “Sé que el FMI ha expresado públicamente algunas preocupaciones que, según entiendo, quieren ver satisfechas antes de seguir adelante con ese préstamo”, explicó.