El Gobierno enviará mañana al Congreso su proyecto de modificación de Impuesto a las Ganancias ante el frente de conflicto reactivado con los sectores gremiales y habilitaría su discusión en extraordinarias. El presidente Mauricio Macri prometió en su campaña electoral, entre muchas otras cosas, que eliminaría ese gravamen y al asumir postergó la discusión. El opo-oficialista Sergio Massa, encaminado a tener que diferenciarse ante el nuevo año electoral, se anticipó y presentó ayer su proyecto para elevar hasta 48 mil pesos el mínimo no imponible. con el objetivo de tratarlo el jueves.
El rumor sobre el proyecto del Gobierno fue confirmado por el ministro de Hacienda, Alfonso Prat-Gay, quien pidió una “discusión seria y razonable” sobre el tema y detalló que el gobierno contemplará "modificar las escalas" y con efecto "retroactivo" al 1 de enero de 2017. Según trascendió la alicuota máxima aumentaría a un rango del 40 o 45 por ciento; el mínimo no imponible subiría un 17 por ciento.
"El Gobierno presentará su proyecto de ley (sobre la reforma del impuesto a las Ganancias) en los próximos días, y espero que haya un discusión seria y razonable respecto de qué se puede hacer dadas las restricciones fiscales que tenemos", pidió el funcionario a los legisladores.
"Vale decir que si se aprueba en el inicio de las sesiones ordinarias del año que viene, igual tiene impacto a partir de enero, así que tenemos un tiempo para discutirlo sana y racionalmente y es lo que esperamos que suceda del otro lado del mostrador", afirmó Prat Gay. Asimismo, el economista expresó que "la promesa de ir resolviendo los problemas de a poco, este año se cumplió con un aumento muy fuerte del mínimo no imponible".
Por su parte, Massa, presentó hoy un proyecto propio para modificar el impuesto a las Ganancias que liberará “a 6 millones de trabajadores” de ese gravamen y anunció que la fuerza que encabeza junto con otros bloques parlamentarios de la oposición buscarán debatirlo en el recinto este jueves en una sesión especial junto con la iniciativa que declara la Emergencia Social.
El proyecto impulsado por el Frente Renovador establece, entre otras cuestiones, un nuevo piso de 48.000 pesos para casados con dos hijos y de 34.000 pesos para los solteros, elimina a los jubilados del pago de ese gravamen y fija que sólo tributen aquellos jubilados que cobran más de 60 mil pesos, a la vez que establece la actualización automática a través de una ley de ese gravamen.
“Planteamos una salida responsable y pagable”, aseguró Massa en una conferencia de prensa que brindó en el salón de Pasos Perdidos del Congreso junto a diputados del Frente Renovador, del Bloque Justicialista, el Partido Socialista, Libres del Sur y del Peronismo para la Victoria.
Tras aclarar que la medida “no tiene costo fiscal para el gobierno nacional para que el Estado no se desfinancie”, Massa señaló que, con esa iniciativa, "pagan los ricos, las mineras, el juego y la timba financiera”, y advirtió que “no hay excusas para no encarar un cambio que beneficia a más de 6 millones de trabajadores que quedarán liberados de este impuesto”.
De todos modos, el FR necesitará reunir quórum propio y luego lograr los dos tercios de los presentes para habilitar el tratamiento sobre tablas, ya que el oficialismo anunció que no prestará quórum para debatir esta cuestión porque va a privilegiar el debate del proyecto impulsado por el gobierno nacional que aún hoy no había ingresado a la Cámara baja y que será debatido en sesiones extraordinarias.
Según estiman en el Frente Renovador, con esta iniciativa “se vuelcan 80 millones de pesos al consumo”, lo que representa que “un punto del PBI vuelve al mercado interno” y destacan “con el mismo énfasis con que el gobierno defiende a los empresarios nosotros queremos defender al laburante”.
De acuerdo a la información brindada por el espacio político liderado por Massa, en enero de 2016 un millón de trabajadores pagaban el impuesto a las Ganancias mientras que hoy lo hacen “2 millones”, y advirtieron que, de no aprobarse el proyecto que promueve el bloque junto a otros sectores de la oposición, "serán 3 millones que además pagaran más” por este gravamen.