Lionel Messi inició el semestre que finalizará con el Mundial de Qatar de la mejor manera: convirtió un lindo gol en el 4 a 0 del París Saint-Germain al Nantes y levantó el trofeo de la Supercopa francesa, que enfrentaba al último campeón de la Ligue One con el de la Copa de Francia en una final celebrada en Tel Aviv, Israel.
El de este domingo fue el primer partido oficial de Christopher Galtier como entrenador del equipo parisino, quien llegó en reemplazo del argentino Mauricio Pochettino. Los otros goles del encuentro fueron marcados por Neymar -la gran figura del partido- por duplicado y uno de Sergio Ramos, de taco.
Galtier dispuso una alineación con casi todas sus figuras, con Kylian Mbappé -suspendido- como principal ausencia, con Donnarumma como arquero titular y la presencia de Sergio Ramos en defensa luego de una primera temporada con el PSG signada por lesiones.
Nantes, por su parte, presentó con un equipo muy similar al que se hizo con la Copa de Francia en mayo de este año, en una reñida final ante el Niza.
Desde el comienzo del encuentro, los parisinos demostraron una notable superioridad, con el portugués Vitinha como conductor -comprado durante el receso al Porto por 40 millones de euros- y la constante circulación de Messi y Neymar, que alternaron como creadores y se asociaron muy bien durante los 90 minutos.
El primer gol llegó en el minuto 21, precisamente tras una combinación entre ambos que culminó el rosarino con el pie derecho tras regatear al portero Lafont.
Sobre el final del primer tiempo, fue el brasileño quien, tras recibir una falta al borde del área, marcó el segundo gol con un gran tiro libre que se clavó en el ángulo derecho.
La segunda mitad comenzó con un dominio abrumador del PSG, que en el minuto 57 estiró la diferencia con un gol de taco de Sergio Ramos tras un rebote del arquero por un disparo del defensor Sarabia. El ex Real Madrid estuvo rápido de reacciones para reponerse de un pifie previo en esa misma jugada.
Tras el tercer gol, el combinado parisino levantó el pie del acelerador y comenzó a rotar jugadores, incluyendo el debut del defensor francés Nordi Mukiele, que llegó este mes procedente del RB Leipzig.
La cuarta conquista también llegó mediante el pie derecho de Neymar, en este caso desde el punto penal y tras una falta del camerunés Castelletto, quien se fue expulsado.
Con dos goles y una asistencia, Neymar, muy elogiado por Galtier en la previa, fue la gran figura del encuentro, al que asistieron unos 30.000 israelíes que no dejaron pasar la oportunidad de ver jugar a sus ídolos.
El PSG se alzó así con una nueva Supercopa de Francia, la novena en los últimos diez años (perdió en 2021 frente a Lille). El equipo de Messi, que también tuvo a Leandro Paredes -ingresó a los 77 minutos- y Mauro Icardi -en el banco-, debutará el próximo sábado en la Ligue 1 frente al Clermont Foot, de cara a una temporada en la que intentará finalmente hacerse con la tan esquiva Champions League.