Las miradas en esta presentación de River estaban puestas en el colombiano Miguel Borja, que jugaba por primera vez como titular desde su llegada, hace dos semanas.
El delantero había ingresado en el encuentro anterior ante Aldosivi, en Mar del Plata, y exhibió cosas muy positivas: un gol y dos asistencias que terminaron en los otros dos tantos que convirtió el equipo.
Pero a diferencia de lo que ofreció en la ciudad balnearia, Borja estuvo más contenido ante los de Junín. El jugador se instaló bien adelante y tuvo menos espacio para desplazarse. El domingo anterior se lo vio apareciendo más retrasado y encarando en velocidad, lo que provocó la diferencia ante sus adversarios.
Como River suele plantarse en el campo rival desde el principio, Borja quedó estacionado esta vez en la puerta del área esperando la pelota, pero sus compañeros no tuvieron la precisión necesaria para asistirlo.
El desarrollo del juego fue siendo más favorable a Sarmiento, que recuperaba la pelota y trataba de aprovechar la velocidad de los hombres más adelantados.
De esa manera llegó el primero gol visitante: la pelota salió desde la izquierda, Mainero la capturó y encaró en diagonal, Héctor Martínez no llegó a cruzarlo y el volante definió cruzado para convertir.
La sorpresa llegó al final del primer tiempo, cuando Andueza marcó el segundo gol de cabeza, luego de una duda de Armani en ir a buscar la pelota después de un tiro de esquina.
River salió con otra actitud a jugar el segundo tiempo, con más decisión para ir hacia el arco rival, y con las inclusiones de Paradela y De La Cruz. El dominio de la pelota fue del local, pero el apuro le impedía tener claridad en el momento de la definición.
Sarmiento quedó decididamente en su campo y apostó todo al contrataque. Precisamente, por esa vía estuvo cerca del llegar al tercer gol, pero la pelota dio en la base del palo en un remate de Mainero. La ilusión de River creció cuando Mammana marcó el descuento de cabeza, después de un envío del ingresado Quintero.
El volante colombiano le aportó técnica y aceleración en esa zona de la cancha, lo que le permitió tener más profundidad en el área rival. Los minutos fueron pasando y no logró encontrar al menos el empate, para mantenerse con expectativa en el campeonato.
La distancia que lo separa con Atlético Tucumán es de diez unidades, y tendrá que mostrar una mejora enorme si pretende ser protagonista del certamen.