La fuga de divisas continuó en mayo en sus máximos históricos. La formación neta de activos externos del sector privado no financiero alcanzó a 977 millones de dólares, cifra explicada por compras netas de clientes en billetes por 777 millones y adquisiciones sin destino específico por otros 200 millones, según el Balance Cambiario publicado ayer por el Banco Central. A eso se suman egresos netos por 887 millones de dólares en el rubro Turismo. En términos brutos, las compras de billetes totalizaron 2358 millones de dólares y fueron concretadas por 745.000 clientes (personas físicas y jurídicas), cantidad de compradores que descendió por quinto mes consecutivo, lo que evidencia una concentración en el negocio financiero. 

La contracara de la fuga es el ingreso de divisas con destino a la bicicleta financiera que ofrecen los altos retornos en pesos y la facilidad de embolsar ganancias y sacarlas del país en moneda dura. Pese a que el titular del BCRA, Federico Sturzenegger, insiste en que esa situación está controlada, el ingreso especulativo continúa en aumento y de diez dólares que entraron, ocho fueron a timba financiera. “Por el lado de las inversiones de no residentes, se registraron ingresos netos por 1000 millones de dólares, como resultado de inversiones de cartera por 878 millones y directas por 122 millones”, señala el informe de la autoridad monetaria. El ingreso de dólares especulativos había sido de apenas 12 millones de dólares en 2015 y saltó a 1925 millones en 2016, mientras que en lo que va de 2017 ya acumuló 3773 millones (si se suman los 878 millones de dólares de mayo). Es decir, en solo cinco meses casi se duplicó la entrada de divisas especulativas respecto a todo el año pasado.

Otro de los datos que llama la atención en el informe oficial es que los ingresos brutos en concepto de inversiones directas de no residentes totalizaron 143 millones de dólares, destacándose como los principales receptores los sectores del Petróleo (38 millones) y Productos Minerales no Metálicos (32 millones). En cambio, la salida de dólares por pago de utilidades y dividendos de empresas de capital extranjero radicadas en la Argentina alcanzó a 300 millones de dólares. Esto significa que la entrada de divisas por inversión extranjera directa, la que llega a la economía real, fue en mayo menos de la mitad de lo que salió por remisión de utilidades. En lo que va del año, la IED alcanzó a 1080 millones y el giro de las multinacionales a sus casas matrices quedó en 766 millones de dólares. 

De acuerdo con el informe del Central, el déficit neto por Turismo, viajes y pasajes (887 millones de dólares) registró un incremento interanual de 39 por ciento. Los egresos brutos totalizaron 1040 millones de dólares, con una suba de 36 por ciento interanual, mientras que los ingresos brutos fueron de 153 millones, 22 por ciento más. Esta salida tuvo lugar en un mes que estacionalmente no cuenta con una actividad intensiva en términos turísticos. En el año, el resultado neto del rubro turismo arroja un déficit de 4181 millones de dólares.

También se registró una concentración en la compra de dólares por parte de inversores. El 40 por ciento de las compras mensuales fueron realizadas por importes de hasta 10.000 dólares (reducción de cinco puntos porcentuales respecto a abril), el 17 por ciento entre 10.000 y 50.000, el 19 entre 50.000 y 500.000, el 6 entre 500.000 y 2 millones, el 3 entre 2 y 5 millones y el 14 con compras a 5 millones. Estos últimos incrementaron en 9 puntos su participación respecto de abril. Las ventas mensuales de billetes de clientes totalizaron 1581 millones en mayo, máximo nivel histórico. El 52 por ciento de las compras de dólares de mayo fueron por montos superiores a los 2 millones. 

El pago de importaciones, en constante aumento, también fue un canal que cobra relevancia en la salida de divisas. En mayo totalizaron 4912 millones de dólares, que representó un aumento de 4 por ciento interanual y cuyo destino fueron principalmente los sectores de Energía, Comercio y Alimentos, bebidas y tabaco.