Los habitantes del estado de Kansas acuden este martes a las urnas para pronunciarse sobre el derecho al aborto en la primera consulta popular sobre el tema desde que la Corte Suprema de Estados Unidos pusiera fin en junio al derecho federal a ese procedimiento.
Los ciudadanos decidirán si eliminan o no de la Constitución de ese estado conservador del medio oeste el derecho a la interrupción voluntaria del embarazo.
Pero el referéndum, que coincide con las elecciones primarias que se llevan a cabo en el estado, también se percibe como un test para el derecho al aborto en todo el país, ya que las legislaturas dominadas por los republicanos se apresuran a imponer prohibiciones estrictas del procedimiento tras la decisión de la Corte Suprema de derribar la sentencia del caso Roe vs. Wade de 1973, que garantizó ese derecho.
Otros estados, como California y Kentucky, votarán sobre la cuestión en noviembre, junto con las elecciones de mitad de mandato, en las que tanto republicanos como demócratas esperan movilizar a sus partidarios en todo el país en torno al aborto.
En Kansas, la votación se centra en una sentencia de 2019 de la Corte Suprema estatal que garantiza el acceso al aborto hasta la semana 22 de gestación.
Un grupo de legisladores presentaron en el Congreso estatal, dominado por los republicanos, una enmienda conocida como "Value Them Both" (Valora a ambos, en español), que eliminaría el derecho constitucional del estado con el objetivo de devolver a los legisladores la reglamentación del procedimiento.
En el bando contrario, los activistas ven la campaña como un intento de despejar el camino para una prohibición total. De hecho, un legislador estatal ya presentó un proyecto de ley con el fin de prohibir el aborto sin excepciones, ya sea por violación, incesto o riesgo para la vida de la madre.
Activistas también se quejan de que la hoja de votación es confusa. Votar "Sí" a la enmienda significa reducir el derecho al aborto, mientras que quienes quieren mantener intacta esta práctica tienen que decantarse por el "No".
En el caso de un "sí" a la reforma constitucional, será el legislativo estatal el encargado de aprobar leyes sobre el procedimiento, que podrían apostar por una mayor restricción de tiempos o excepciones o por la prohibición total, como está sucediendo en otros estados.
Si los ciudadanos de Kansas dicen "no" a la reforma, la constitución estatal quedaría sin cambios y los abortos de hasta 22 semanas seguirían siendo legales, aunque los legisladores aún podrían aprobar leyes restrictivas.
Kansas es proclive a apoyar al Partido Republicano, favorable a una regulación más estricta del aborto. Pero una encuesta de 2021 de la Universidad Estatal de Fort Hays reveló que menos del 20% de los encuestados en ese estado estaba de acuerdo en que el aborto debería ser ilegal, incluso en casos de violación o incesto.