El pasado martes en las instalaciones de Newell's en el parque Independencia se vivieron dos hechos curiosos que expresan los días de confusión que atraviesa la institución. En primer lugar, más de cien socios que se encontraban reunidos debatiendo el presente de la entidad fueron echados de las instalaciones del club por personal de seguridad en nombre de la Comisión Directiva. Y un rato más tarde, en las mismas instalaciones rojinegras, los barras del club desplegaron las banderas que le robaron en cancha de Unión a Central Norte por Copa Argentina (foto) y festejaron "el trofeo de guerra" con un asado en los parrilleros con plena libertad de expresión.

Todo el arco opositor rechazó el pasado miércoles lo sucedido el martes al caer la tarde, cuando personal de seguridad echó a más de cien socios que se habían reunidos en las instalaciones de la entidad para abordar la situación económica, política e institucional de Newell's. El cónclave tuvo presencia de dirigentes de todas las agrupaciones opositoras: Movimiento 1974, ADN Leproso, Movimiento Pertenencia Leprosa y Movimiento Faustino González.

El miércoles la dirigencia del club se desentendió de la actitud del personal de seguridad que obligó a interrumpir la improvisada asamblea de socios. Por lo cual, se puede presumir que esto no volverá a ocurrir y los socios podrán seguir discutiendo el futuro del club en sus mismas instalaciones.

Pero cuando los socios echados dejaron el parque Independencia, con total libertad se desenvolvieron los barras en los parrilleros de la entidad. Los hinchas de la barra gozaron de un asado después de que colgaran en el tejido perimetral las banderas que les robaron a los hinchas de Central Norte de Salta el pasado domingo en cancha de Unión (ver foto). Los trapos aparecieron en el parque Independencia junto a otros de la barra de Newell's y fueron visibles incluso para aquellos transeúntes que pasaban por los alrededores del Coloso del Parque.

En cancha de Unión el partido de Copa Argentina que ganó la Lepra por 4 a 1 se demoró en la reanudación en el segundo tiempo por los incidentes que protagonizaron los barras leprosos, quienes tomaron por sorpresa a los hinchas salteños en su tribuna y les arrebataron dos banderas que sacaron del estadio sin problemas, las trajeron a la ciudad y las mostraron en el club dos días después, justo el mismo día que los socios reunidos para hablar del futuro de la entidad fueran echados por personal de seguridad.