Luego de dos años y medio como titular de la Cámara de Diputados, Sergio Massa desembarca en el Gabinete del presidente Alberto Fernández como ministro de Economía, Producción y Agricultura, con muchas expectativas y desafíos por delante, cuya gestión tendrá como objetivo "estabilizar y encaminar" una economía argentina en crisis.

En la Casa Rosada apuestan a que la llegada de Massa le inyecte una cuota de oxígeno al Gobierno de Alberto Fernández, que luego de la renuncia de Martín Guzmán como titular del Ministerio de Economía no logró contener la crisis cambiaria ni económica, afectada por una alta inflación, la falta reservas y un tipo de cambio inestable.

"Primero hay que estabilizar y después encaminar los temas de fondo", señalaron desde el Frente Renovador, espacio que lidera Sergio Massa, al tiempo advirtieron que "no hay lugar para más errores".

La llegada del tigrense al Gabinete nacional en un rol de superministro de Economía, que asume a las 17 horas el Museo del Bicentenario de la Casa Rosada, fue considerado por propios y ajenos como "una de las últimas cartas" que le quedan al Gobierno para superar la turbulencia económica.

Luego de conocerse el inminente arribo de Sergio Massa al Palacio de Hacienda, el impacto en los mercados fue alentador e incluso generó una baja en la cotización del dólar blue, pero aún queda por verse si efectivamente el tigrense podrá llevar adelante las correcciones necesarias para salir de la crisis económica.

Desafíos: inflación, reserva y tipo de cambio

En el marco del hermetismo sobre el nuevo paquete de medidas económicas, la gestión de Massa tendrá varios desafíos que encarar, por lo que se espera que los anuncios se enfoquen en el dólar, el crecimiento de las reservas y la marcha de los precios. 

"El objetivo es ordenar y cuidar las cuentas públicas", remarcó Massa al dar a conocer los nombres de su equipo, muchos de los cuales son de su riñón y que anticipan los ejes de su gestión como el caso de Raúl Rigo, un experto en cuentas públicas que ahora está a cargo de la Secretaría de Hacienda. 

Dentro de su entorno dejaron trascender que priorizará la generación de divisas a través del incentivo fiscal a los sectores de la energía, la agroindustria y la economía del conocimiento, con el foco en convertir a la Argentina en una "fábrica de dólares para exportar trabajo argentino".

La necesidad de acumular reservas es una de las claves frente a la inestabilidad monetaria, que en el plano de lo concreto se traduce en la decisión de estimular a las actividades con potencial exportador -el sector energético, el agroindustrial, la industria del software y la tecnología aplicada- con un paquete de medidas de incentivo.

Sobre este punto, prima la mirada de "corregir" el tipo de cambio oficial. Las alternativas van desde devaluar un 15 por ciento hasta un desdoblamiento cambiario, aunque una propuesta más moderada, como sería extender los beneficios del dólar soja a todos los sectores exportadores, genera mayores consensos.  

Ligado a esta situación aparece la necesidad de que el campo liquide los dólares. En declaraciones radiales, el presidente de la Cámara de la Industria Aceitera (Ciara), Gustavo Idígoras consideró que "el ingreso de Sergio Massa ha generado expectativas", mientras que en diálogo con este diario, Carlos Achetoni, de Federación Agraria, anticipó que Massa "va a buscar mejorar el esquema para que sea más atractivo para liquidar las divisas".

Uno de los problemas principales tiene que ver con los altos índices de inflación, atada al sistema de precios, la actividad económica y la destrucción del poder adquisitivo del salario, por lo cual uno de los temas más urgentes es revertir el deterioro en la distribución del ingreso.

En el caso del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), se profundizará "la búsqueda de consensos", una postura que ya mostró en el Congreso cuando trabajó activamente para la aprobación del programa con el organismo.

Massa tiene llegada entre dirigentes políticos de Estados Unidos, tanto republicanos como demócratas, vínculos que en algún caso cultivó desde joven, que se fortalecieron con el paso del tiempo y que le permitieron llegar a tener un diálogo periódico con protagonistas influyentes.

Ligado a la agenda internacional, en los próximos quince días Massa emprenderá un viaje a Estados Unidos, Europa y Qatar para negociar inyección de divisas al país. Durante su paso por Estados Unidos, planea entrevistarse en Washington con funcionarios del FMI, el Departamento del Tesoro de Estados Unidos, el Banco Mundial y el Banco Interamericano de Desarrollo. 

De allí viajará a encuentros con el Club de París y después a Qatar, a reuniones con el Fondo Soberano de ese país, con la idea de que aporten a proyectos en energía y seguridad alimentaria.

Otros temas que aparecen en la agenda tienen que ver con la administración de los subsidios, cuyos aumentos de tarifas comenzarían a aplicarse a fines de agosto tras la inscripción a la segmentación, y los planes sociales. 

Respecto a este último, que representarían el 1,9 por ciento del PBI, la intención de Massa es ordenarlos y darles "transparencia". Incluso ya había sido pedido por la propia vicepresidenta tiempo atrás cuando dijo que que había que traspasar el control de los movimientos sociales a los intendentes. 

Expectativas por los anuncios

Diferentes sectores económicos y políticos manifestaron su apoyo y expectativa ante la llegada de Sergio Massa al Gabinete nacional y de quienes ocuparán las secretarias de Industria, Agricultura y Comercio adelantados por el nuevo titular de Economía.

El titular de la Unión Industrial Argentina (UIA), Daniel Funes de Rioja, señaló que la visión del sector es "alentadora" respecto de las medidas que tomará el Gobierno a partir de la designación de Massa en el Gabinete, y resaltó que "la recuperación económica, la reactivación del 2021 es marcada, aunque no ha sido homogénea porque los efectos de la covid-19". En tanto, sobre el rol de Sergio Massa, opinó: "Tenemos expectativas de un hombre que tiene función pública, tiene experiencia, tiene relaciones con el sector empresarial, tiene una visión respecto de la iniciativa privada y las reglas de la competencia y que también entiende el mega o macro sistema internacional dentro del cual estamos insertos".

Desde la Cámara Argentina de la Construcción (Camarco) destacaron que la gestión de Massa “sin duda le va a imponer una dinámica distinta a la gestión“ y que hay que esperar “a ver cuáles son las medidas para afrontar la difícil situación”. También apuntaron que De Mandiguren “ya estuvo en el cargo anteriormente y sin duda es un gran conocedor de todo lo relacionado con la producción y la industria”.

El presidente de Industriales Pymes Argentinos, Daniel Rosato, manifestó que “la asunción de Massa como superministro en las áreas de producción, agricultura y economía va a ser muy importante" y que "cuanta con un equipo de gente con mucha experiencia y mucho conocimiento y las distintas áreas”.

De igual forma, el presidente de la Cámara de Empresas Argentinas de Gas Licuado, Pedro Cascales, subrayó que “es el ministro adecuado en esta situación dado que combina su capacidad política con el armado de un buen equipo con experiencia y conocimiento”.

Finalmente, el vicepresidente de Pequeñas y Medianas Industrias de la Unión Industrial Argentina (UIA), Matías Furió, expresó su satisfacción por las designaciones de De Mendiguren y su equipo integrado por Gabriela Lizana, Priscila Makari, Carla Pitiot y Tomás Canosa.

En ese sentido, reveló que “las pymes confían que, con sus experiencias en la industria y el conocimiento de las necesidades del sector productivo, se fortalecerán los instrumentos de apoyo a las empresas y se profundizará lo actuado en materia de financiamiento y desarrollo industrial”.