El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, informó que no se registraron homicidios durante la jornada de este martes. El mandatario compartió en su cuenta de Twitter una publicación de la Policía Nacional que indica que en los dos primeros días de agosto no se cometió ese delito en el país centroamericano.

“Quien salva un lobo, sacrifica a las ovejas”, expresó Bukele. “Aunque algunos gobiernos y ONG nos ‘exigen’ proteger a los pandilleros, nosotros estamos para proteger a la población honrada, que por primera vez en décadas, puede sentir lo que significa vivir verdaderamente en paz. Seguimos…”, publicó este miércoles en su Twitter.

Según el comparativo que realiza la Policía Nacional, en la misma fecha del 2018 se registraron seis homicidios; hubo un caso en 2019, cinco en 2020 y tres en 2021.

El Salvador se encuentra en estado de excepción desde el 27 de marzo de este año tras una ola de asesinatos que dejó 87 víctimas en un fin de semana. En ese entonces, Nayib Bukele le pidió a la Asamblea Nacional que se aprobara el régimen de excepción por 30 días para "restablecer el orden y la seguridad ciudadana". La norma prorrogada el 19 de julio por cuarta vez.

La medida afecta los derechos a asociarse, a que una persona sea informada de las razones por las que es detenida, que la prisión por averiguación no puede exceder las 72 horas y que la correspondencia es inviolable.

El régimen de excepción ha sido cuestionado por organizaciones salvadoreñas e internacionales. Según medios locales, 63 personas murieron en los penales desde el anuncio de la medida, aunque no se cuenta con cifras oficiales.

La Procuraduría para la Defensa de los Derechos Humanos (PDDH) de El Salvador, registró 1.931 denuncias de violaciones a los derechos humanos durante el régimen. Asimismo, la organización de derechos humanos Cristosal aseguró que el 65% de las 808 denuncias que recibieron de capturas involucra a personas de las que se desconoce el paradero, por lo que podrían calificarse como casos de desapariciones forzadas.

Una investigación periodística del medio El Faro ratificó la existencia de negociaciones entre Bukele y las pandillas y que la ruptura del pacto culminó en la matanza de 87 personas.