En distintos puntos de la geografía de la provincia de Salta los productores rurales reclaman por un denominador común: los excesivos costos de los insumos que necesitan para cosechar.
Salta/12 dialogó con algunos productores de distintos rubros, quienes mostraron sus molestias por la incertidumbre económica que se vive a nivel nacional.
Dólar diferencial
Natalio Iglesias preside la Asociación de Productores de Legumbres del NOA y se desempeña en el sur de la provincia, en el municipio de Rosario de la Frontera, donde produce legumbres y cereales.
Para él, una de las principales desventajas para el sector tiene que ver con el precio del dólar: “la diferencia en el tipo de cambio es muy grande, porque es de más del 100%, y nosotros no podemos vender con un dólar a $130 y comprar insumos con un dólar de $260, $280 o $300, porque eso es imposible”, explicó.
Agregó que siguen Ccon el problema de la falta de combustible y no hay una cantidad necesaria que esté abasteciendo hoy al sector agrícola”.
Con los cambios que se dieron en el gabinete nacional, el productor rural se mostró esperanzado en que "las medidas que se están tomando hoy en el Gobierno nacional sean positivas y que se propicie que haya un solo tipo de cambio en el ámbito de la producción, porque no tan solo la soja tiene sus insumos en dólares, sino que toda la producción argentina los tiene".
"No vemos el motivo por el que solamente haya privilegios para la soja y no con todas las economías regionales y las producciones del país, por eso consideramos que tiene que haber un solo dólar que sea competitivo, que entendemos que debería estar por el costo del dólar tarjeta, o sea, entre $240 y $260”, protestó.
En lo que hace a su rubro, contó que “hoy está todo paralizado, no se compra ni se vende, y en el caso de las legumbres, no estamos vendiendo casi nada ni estamos exportando tampoco porque el precio está muy bajo”.
“Se hace muy engorroso el tema de la exportación debido a que este gobierno no tiene previsibilidad y eso es un problema permanente. Por eso esperamos que solucionen el tema del combustible y que pongan un solo tipo de cambio que sea competitivo para el sector productivo de toda la República Argentina”, concluyó.
Costos en insumos
Marta Cruz integra el Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE) de la rama rural en municipio de Apolinario Saravia. Como productora hortícola día a día ve cómo la inflación y el precio del dólar encarece el costo de los insumos necesarios para la producción.
"El precio de las semillas, los agroquímicos, más el combustible nos perjudica porque todo es a costo de cada uno de los productores, y si bien es cierto que el intendente (Marcelo Moisés) ayuda con lo que puede, hay un descuido del Gobierno nacional hacia este sector, ya que no hay ayuda de ningún tipo", lamentó.
Con preocupación, señaló que la situación económica de los productores "en estos momentos no es nada favorable, y sabemos que nuestro pueblo depende económicamente de la producción agro-hortícola, da trabajo a nuestra gente y alrededores, destacando que nuestra producción abastece no solo al departamento Anta y a la provincia, sino también al resto del país".
Fumigación
Otro tema que puso de relieve Marta Cruz tiene que ver con una denuncia contra productores de la zona de Apolinario Saravia que utilizan un herbicida que perjudicó la producción de varios productores rurales.
"Acá en la zona vecina siembran soja, maíz y algodón, donde usan el herbicida 2,4 DB, que está prohibido, y fumigan en avioneta para secar su producción y poder trillar, pero este herbicida a través del viento se dispersa y llega a los sembradíos de hortalizas que afecta a los pequeños productores, por eso vimos que algunas plantaciones no se pudieron recuperar como, por ejemplo, zapallitos, cebolla, melón, tomate", relató.
Ante esta situación, Cruz afirmó que "la producción de esta temporada se vio afectada por el atraso que tuvimos con este producto, y tenemos un atraso de un mes más o menos, por lo que recién empezaremos a cosechar los primeros días de septiembre".
Tirar la producción
En el municipio de Pichanal, en el norte de la provincia, el productor de limones Edgardo Marcelo Tanco decidió tirar su producción ante la imposibilidad de establecer un precio redituable.
Dada la importante suba que tuvo el limón en las últimas semanas y los vaivenes económicos que envuelven al país, el productor explicó que "cosecharlo, trasladarlo y comercializarlo sale muy caro, y vendiéndolo se perdería $40 por cajón, lo que en grandes cantidades significa una enorme pérdida económica, es por eso que no hay forma de colocarle un precio para el mercado".
"A pesar de las afectaciones que nos toca vivir, continuamos pagando impuestos y empleados, pero no hay quién nos dé respuestas o garantías para poder salir adelante, lo que nos genera mucha impotencia", finalizó.