Israel y la Yihad Islámica Palestina iniciaron el domingo por la noche una precaria tregua después de tres días de hostilidades que costaron la vida a decenas de palestinos, incluidos niños, en ataques israelíes sobre la Franja de Gaza.
Hasta pocos minutos antes del inicio del alto el fuego, obtenido gracias a la mediación egipcia, el ejército israelí llevó a cabo ataques contra posiciones de la Yihad Islámica en el enclave palestino "en respuesta a los cohetes disparados" hacia el sur del territorio israelí, donde sonaron las sirenas de alerta.
El acuerdo negociado por Egipto tenía como objetivo detener la violencia que ha dejado 44 palestinos muertos, incluidos 15 niños, y que constituye el peor enfrentamiento en Gaza desde una guerra de 11 días el año pasado.
El enviado de la ONU para Medio Oriente, Tor Wennesland, se felicitó en Twitter por el acuerdo, pero recordó que "la situación sigue siendo muy frágil". "Insto a todas las partes a respetar el alto el fuego".
Tanto la Yihad Islámica como Israel aceptaron la tregua, guardándose ambas partes el derecho de réplica en caso de futuras agresiones.
"Si se viola el alto el fuego, el Estado de Israel se reserva el derecho de responder con firmeza", señaló la oficina del primer ministro israelí, Yair Lapid, agradeciendo a Egipto "sus esfuerzos" para mediar.
15 niños
muertos
El ministerio de Salud de Gaza anunció este domingo que 17 personas más, entre ellas nueve niños, murieron por ataques israelíes.
Desde el viernes, "44 palestinos cayeron como mártires, entre ellos 15 niños", y "360 resultaron heridos", según el último balance del ministerio del enclave que gobierna el grupo islamista Hamás.
Además, la vida diaria en Gaza se ha paralizado y la única central eléctrica tuvo que cerrar el sábado por falta de combustible, debido al bloqueo de las entradas del enclave por parte de Israel desde el martes.
La agencia humanitaria de las Naciones Unidas, OCHA, advirtió del "grave riesgo" para la "continuidad de los servicios básicos esenciales" en la región.
Cohetes hacia Jerusalén y Tel Aviv
El domingo, la Yihad Islámica lanzó por primera vez cohetes hacia Jerusalén, pero estos fueron derribados por el ejército.
Los disparos tuvieron lugar cuando centenares de israelíes conmemoraban en Jerusalén una fiesta judía, con la visita de nacionalistas a la Explanada de las Mezquitas, tercer lugar santo del Islam pero también el más sagrado para el judaísmo, que lo conoce como el "Monte del Templo".
En el sur y en el centro de Israel, los civiles se vieron obligados a resguardarse en los refugios antiaéreos.
Desde el viernes, tres personas resultaron heridas por disparos de cohetes y otras 13 resultaron heridas leves, según un último balance de los servicios de emergencias Magen David Adom.