El gobierno de Cuba expresó su preocupación por la situación en la ciudad de Matanzas (a 100 kilómetros de La Habana) donde debieron intensificar el combate al fuego “que no cede” luego de la explosión de dos tanques de combustibles en una planta almacenadora.
"Desde el puesto de mando en Matanzas evaluamos la estrategia para las próximas horas. Es un día crucial, decisivo", dijo este lunes el presidente Miguel Díaz-Canel.
A las 23 horas de Cuba de este domingo (GMT -4) una explosión “puso en tensión” al país, expresó la Presidencia. Sin embargo, en un comunicado emitido este lunes se aclaró que no colapsó un tercer tanque. Sí se confirmó que se derramó petróleo del segundo tanque que había explotado el sábado.
“En estos momentos hay varios equipos de bomberos tratando de cortar la expansión del fuego disperso en la zona del siniestro”, informó el gobernador de Matanzas, Mario Sabines Lorenzo.
Autoridades de la ciudad informaron que el incendio que se inició en la noche del viernes fue provocado por una descarga eléctrica. El director de la División Territorial Comercializadora de Combustibles Matanza, Rigel Rodríguez, explicó que alrededor de las 05.00 se escuchó la segunda explosión de un tanque con 52.000 metros cúbicos de combustible, según indicó el medio cubano Granma.
El Ministerio de Salud Pública informó que hay 122 personas atendidas por las explosiones, 24 de ellas aún están hospitalizadas. Hay 16 personas desaparecidas y un fallecido.
Mientras tanto, familiares de los desaparecidos se reunieron con el presidente Díaz-Canel en un hotel céntrico de Matanzas. Allí, además, recibieron asistencia médica y psicológica para atravesar el minuto a minuto de su espera.
El mandatario agradeció el sábado los ofrecimientos de ayuda de México, Venezuela, Rusia, Nicaragua, Argentina y Chile, así como el ofrecimiento de asesoría técnica por parte de Estados Unidos.