El allanamiento que el FBI realizó este lunes en la residencia de Donald Trump en Florida mantiene en vilo a la política estadounidense a la espera de conocerse por qué se investiga al exmandatario y qué consecuencias tendrá para él este caso. La agencia de inteligencia criminal sigue sin explicar las razones por las que envió a sus agentes a registrar Mar-a-Lago, el club de Palm Beach donde se encuentra la residencia de Trump, aunque medios locales como el Washington Post aseguran que la acción forma parte de una investigación para determinar si el magnate republicano se llevó documentos clasificados de la Casa Blanca al concluir su gobierno en 2021, en momentos en que enfrenta otras dos causas judiciales y aspira a pelear por un segundo mandato en 2024.
Mientras se aguarda algún detalle o explicación oficial, numerosos dirigentes republicanos, incluida la dirección del partido, arremetieron este martes contra el "abuso de poder" de los demócratas. Y desde el partido de Joe Biden recordaron, por su parte, que si hubo registro es porque existe una orden firmada por un juez. Trump, por su parte, se declara inocente y se considera blanco de una caza de brujas.
Desde la Casa Blanca aseguran que el presidente Biden no estaba avisado del registro y se enteró por los medios de comunicación, y remarcan que esta investigación es "independiente". En su rueda de prensa diaria la vocera del presidente, Karine Jean-Pierre, evitó dar detalles sobre una investigación que se está llevando a cab" y, consultada por las acusaciones de persecución política vertidas por los republicanos, respondió que "Biden respeta el Estado de derecho". Aunque en sus actos públicos de este martes Biden no habló directamente de Trump, por la mañana dio un mensaje que parecía dirigido al expresidente, cuando criticó a quienes "buscan el poder" frente a quienes "apuestan por la unidad".
"Anarquía y caza de brujas"
Luego del inédito registro, muchos dirigentes republicanos subrayaron su indignación y su apoyo a Trump, quien por su parte aprovechó para intensificar su campaña de recaudación de fondos. "La anarquía, la persecución política y la caza de brujas deben ser expuestas y detenidas", manifestó el exmandatario entre 2017 y 2021, quien en un correo electrónico subrayó que "nunca antes le había pasado algo así a un presidente de los Estados Unidos".
"Ahora, mientras ven a mis candidatos respaldados obtener grandes victorias y ven mi dominio en todas las encuestas, están tratando de detenernos al partido republicano y a mí una vez más", agregó Trump, quien no estuvo presente durante el registro. Por la mañana, al igual que en la noche del lunes, simpatizantes del expresidente se acercaron a las inmediaciones de Mar-a-Lago, la fastuosa vivienda y club social de cara al Atlántico de Trump, para mostrar con pancartas y carteles de la campaña electoral de 2020 su rechazo al registro.
Fuerte respaldo republicano
Muchos de esos manifestantes se hicieron eco de las palabras del gobernador de Florida, Ron DeSantis, preguntándose por qué no se investiga del mismo modo a Hunter Biden, hijo del presidente y al que los republicanos acusan de corrupción. "La redada en Mar-a-Lago es otra escalada en el armamento de las agencias federales contra los opositores políticos del régimen (en alusión al gobierno de Biden), mientras que personas como Hunter Biden son tratadas con guantes de seda", señaló DeSantis, aliado político de Trump y posible aspirante a la nominación republicana en 2024.
En la misma línea, el líder de los conservadores en la Cámara de Representantes, Kevin McCarthy, denunció una "instrumentalización intolerable con fines políticos" del Departamento de Justicia y prometió una investigación sobre su funcionamiento en cuanto los republicanos vuelvan al poder. Incluso defendió a Trump su ex mano derecha Mike Pence, posiblemente rivales en las primarias republicanas de cara a las presidenciales de 2024 y con el que el expresidente se enemistó desde el episodio del asalto al Capitolio. "Comparto la profunda preocupación de millones de estadounidenses por el registro sin precedentes de la residencia personal del presidente Trump", tuiteó el ex vicepresidente.
Si hubo registro, hubo orden de un juez
Según apuntan distintos medios de comunicación, el registro de la vivienda está relacionado con la búsqueda de documentos que supuestamente Trump extrajo de la Casa Blanca, y entre los que habría material clasificado que se llevó consigo en lugar de entregarlos al archivo histórico tal como manda la ley. Este martes la líder de la mayoría de la Cámara de Representantes, la demócrata Nancy Pelosi, dijo en declaraciones a la cadena MSNBC que no cuenta con más información que la de dominio público, pero señaló que las autoridades federales tendrán una justificación para proceder con el registro ya que "nadie está por encima de la ley, ni siquiera un presidente o un expresidente de los Estados Unidos".
El Departamento de Justicia viene investigando el mal manejo de la información clasificada desde hace varios meses, luego de que la Administración Nacional de Archivos y Registros revelara que había recuperado de Mar-a-Lago 15 cajas de registros de la Casa Blanca a principios de este año. Esta investigación contra Trump se suma a otra que trata de determinar si el multimillonario y sus aliados son responsables del ataque al Capitolio del seis de enero de 2021, cuando una turba de sus seguidores instigados por él mismo irrumpió para impedir que se validen los resultados de los comicios de noviembre de 2020. Además un fiscal de Fulton, Georgia, está investigando si Trump y sus aliados intentaron interferir en las elecciones de ese estado, que finalmente le dio la victoria por una ventaja mínima a Biden.