Roberto Pianelli, Secretario General de Metrodelegados estuvo en diálogo con Pablo Caruso y Luispa Giniger y se refirió a la compra que realizó Mauricio Macri cuando era Jefe de Gobierno Porteño de trenes con material cancerígeno denominado asbesto, que hoy forman parte de las líneas de subtes.
Tras la denuncia de varios operarios de subte sobre la presencia de asbesto en los vagones y luego de las declaraciones de Eduardo de Montmollin, titular de SBASE (Subterráneos de Buenos Aires Sociedad del Estado), que en el día de ayer reconoció que se compraron trenes con asbesto "asumiendo que estaban en condiciones", Roberto Pianelli explicó que se sabía que "estos trenes eran viejos y que antes usualmente tenían amianto para aislar", la presencia de este material, que es cancerígeno está prohibido desde 2002 en España y desde el año 2003 en argentina, "se sabía que había que pedir una cierta certificación para saber que se estaba comprando", dijo Pianelli.
"A medida que se iba utilizando en el mundo, se detectó cómo el amianto era un asesino silencioso ya que la fibra de amianto es imperceptible a la vista y cuando lo inhalás se clava en los pulmones y recién se puede detectar cuando empezás a enfermarte", dijo Pianelli en referencia al material presente en varias líneas de subte. "A partir de la prohibición, el estado tiene la responsabilidad de ver donde está ese material para que se volatilice y no enferme y eso no se hizo", explicó el Secretario General de Metrodelegados.
Para Pianelli, lo que dijo el titular de SBASE en el día de ayer donde afirmó que no puede garantizarse que se haya leído toda la documentación sobre la presencia de amianto en los trenes comprados a España "es muy grave, nosotros lo sabíamos porque después de dos años que Sbase negaba que había amianto después lo reconoció" explicó Pianelli y agregó: "en esa discusión pedimos los manuales y los manuales demostraban que había amianto".
"Inclusive fue Macri a buscar los trenes a España" explicó Pianelli y agregó: "el titular de SBASE ayer no dijo que aparte de los trenes comprados en españa, los trenes que funcionaba los años anteriores y los que siguen funcionando, están llenos de amianto". Pianelli fue categórico: "durante 20 años no se preocuparon por sacar el amianto y para poner la frutilla al postre, compraron trenes que tenían amianto cuando estaba prohibido"
Pianelli explicó que estos trenes "siguen funcionando porque no hay otros" y dijo: "Si no nosotros hiciéramos lo que tenemos que hacer, por 5 o 6 años no habría subtes en la argentina, o solo quedarían dos lineas: la A y la H, que tienen trenes nuevos libres de amianto". "El gobierno no está licitando la compra de nuevos trenes, si no licitan se posterga en el tiempo de por vida el problema", finalizó.