Fernando Juan Lima te cuenta cuáles son los mejores estrenos de cine de la semana en la Argentina. En esta oportunidad, Rosita: la película de Verónica Chen que derriba prejuicios
En su cuarto largometraje, Verónica Chen amaga con hacer una película que, finalmente, no será. En el camino, logra desmontar más de un prejuicio del espectador. Si en su esfuerzo anterior, Mujer conejo, la directora jugaba con diversos tonos, géneros y mecanismos narrativos, en Rosita la apuesta es –a todo o nada– a un realismo urbano de espacios abiertos y cerrados, de ciudades y suburbios, pero también de ámbitos íntimos, de dormitorios, livings y, sobre todo, cocinas donde se juegan algunas verdades del presente, el pasado y el futuro. Para construir a su protagonista, Lola, una joven de unos treinta años con tres hijos de diversas edades, Chen confió en el talento de la actriz Sofía Brito, responsable de cargar sobre los hombros el punto de vista casi total de la historia. Primer prejuicio, de orden social, que Rosita pone en tensión: Lola es rubia, de ojos claros y vive en la localidad norteña de Florida, pero está bien lejos de tener un buen pasar. Su trabajo como masajista en un salón de belleza es estable, pero apenas alcanza para subsistir; la posibilidad de salir de la casa del abuelo de los chicos, donde vive “de prestado”, y mudarse con sus hijos parece estar lejos en el horizonte.