Georgina Orellano, trabajadora sexual y Secretaria General Nacional de la Asociación de Mujeres Meretrices de Argentina (AMMAR), el sindicato de las y los trabajadores sexuales del país, dialogó en La Casa Invita sobre la situación del sector y explicó los históricos reclamos que desde la organización llevan adelante.
"El contexto actual de emergencia sanitaria lo que deja en evidencia es la precarización laboral del sector de los trabajadores y las trabajadoras sexuales", aseguró, y subrayó la urgencia de la creación y aplicación de políticas públicas que incluyan las demandas de AMMAR.
En ese sentido, sostuvo que una de esas demandas es "el reconocimiento del trabajo sexual como tal para salir de los marcos de ilegalidad y clandestinidad y para poder generar con nosotras y para nosotras políticas públicas que nos den las herramientas para acceder a una salud integral sin estigma y sin discriminación", sostuvo.
Por otra parte, Orellano explicó que uno de los logros de AMMAR fue la organización sindical del sector que les permitió hablar por sí mismas a la hora de defender sus derechos y decidir sobre sus cuerpos. "Siempre que se hablo de trabajo sexual a nivel estatal se habló desde una mirada sanitarista, el interlocutor para nosotras siempre fue o la policía o el Ministerio de Salud" expresó y señaló que, bajo esa perspectiva, se las infantiliza y victimiza.
"Queremos hablar de la precarización laboral y sentarnos con el Ministerio de Trabajo como lo hace cualquier sindicato, no pedimos ni más ni menos que lo que hacen los demás sindicatos hacen por defender los derechos de sus trabajadores y trabajadoras", subrayó.
