Pasan cosas raras con la pandemia. En pocas semanas pasamos de la incertidumbre a tener cientas de vacunas posibles contra el coronavirus. Hay como una carrera mundial para encontrar la vacuna, y acá uno no sabe si la carrera es para llegar primero, para ver quién la tiene más grande – a la jeringa – o si es para llenarse de guita a costa de la pandemia.
Por suerte, Adrián Stoppelman nos ayuda a diferenciar cada vacuna según el país de procedencia. “Rusia tiene la Sputnik 5. Lindo nombre. Es más bien de supositorio, pero no importa. Los chinos tienen la de Sinopharma. Nombre soso como brote de soja, pero si funciona, no hay drama. La de Cuba es genial: se llama La Soberana” contó Stoppelman. “Pero hay muchos países buscando la vacuna y tratando de ponerle un nombre acorde. Por ejemplo:
- La israelí es intramuscular e inyectable y se llamaría: Shalom Tujes
- La India… no es vacuna. No puede ser vacuna, porque las vacunas son sagradas. Es la vegetariuna. Y se llama Mahatma Tecurabindranat Mahavishnu Shankar Hare Hare
- La Árabe: Abarajá la aguja
- Francesa: Le Virú a la merd
- Venezolana: La expropiadora
Conoce todos los posibles nombres de las vacunas en la columna de humor de Adrián Stoppelman.