Entrevistada por Yanina Chiafitella y Andrea Conde, la ministra de Seguridad dijo que están recabando datos para conocer si la cantidad de tomas, que en el país es de 800 a 1.000 por año, aumentó en los últimos meses.
"El estado siempre va detrás del problema del déficit habitacional, que es de entre 3,5 y 4 millones de viviendas, o sea, afecta a casi el 10 % de la población: es una cantidad significativa de presión sobre la tierra ociosa", dijo Frederic.
La ministra recordó que "la justicia es la primera que interviene cuando hay una toma y define el criterio a adoptar, por ejemplo, dictar una orden de desalojo. Pero en la provincia de Buenos Aires los desalojos están suspendidos por ley hasta el 30 de septiembre".
A Frederic le resultó llamativo el lugar que las tomas ocuparon en la prensa la semana pasada, "al mismo tiempo que el gobierno nacional, el de la provincia y los municipios anunciaban una inversión inédita en la lucha contra la inseguridad. El tema más preocupante para nosotros es el crecimiento del delito desde abril", dijo.
Aunque se duplicará la cantidad de efectivos de las fuerzas federales en la calle –se sumarán casi 4.000–, la policía bonaerense "tiene mucho personal con licencia médica y otra parte con poco entrenamiento". Este año "vamos a tener problemas para renovar efectivos. Eso se va a demorar porque con el aislamiento, la docencia está replegada y no se están haciendo entrenamientos", advirtió.
