El filósofo y asesor presidencial, Ricardo Forster charló con Pablo Caruso y Luispa Giniger y analizó la coyuntura política actual de cara al 17 de octubre.
"No es nada sencillo pilotear un país en medio de una pandemia y el Gobierno viene haciendo un esfuerzo gigantesco para palear lo más posible el impacto", sostuvo.
Para Forster, "la oposición tanto mediática como económica es salvaje, golpean por todos los lados".
"El gobierno empezaba a acomodarse y cuando comenzaba a equilibrarse viene la pandemia, que nos mostró a un Alberto que había encontrado un discurso de empatía, de cercanía", agregó.
En ese sentido, sostuvo que "hoy Alberto esta teniendo que salir de ese momento donde su discurso pierde la potencia, ahora hay que encontrar la narrativa fuerte y poderosa para decirle a la sociedad a donde estamos yendo", explicó.
"Hoy queda claro que hay que dar una fuerte pelea para sostener a la base social política propia. Hay una parte de esta sociedad que ha sido capturada por el odio y el revanchismo social", agregó.
La convocatoria del 17 de octubre
Forster consideró que "la convocatoria tiene que ser mucho más amplia que la de la CGT. El Frente de Todos expresa una corriente de confluencias múltiples que debería estar instalado en la convocatoria".
"No se puede llamar a una movilización presencial porque seria antagonizar con las políticas de cuidado que planteo el gobierno", agregó.
Además, sostuvo que "la imagen de Alberto y Cristina un 17 de octubre es muy fuerte y muy necesaria" y explicó que el presidente, "es una persona que escucha y está atento al impacto de las decisiones, tiene la capacidad de decir 'me equivoqué', que es rarísimo en política".
"si Alberto piensa que tiene que corregir cosas lo haría sin titubear", consideró y explicó que el presidente, "está convencido que es un gobierno que cuida a los mas débiles de la sociedad, pero que por el bloqueo comunicacional hay una dificultad para seguir mostrando lo que se hace".
También, sostuvo que "es un momento donde hay que tomar decisiones y actuar de cara a la sociedad, hay adversarios que se van convirtiendo cada vez mas en enemigo".
La postura de Argentina en Venezuela
"Me dejó una enorme preocupación, hay una necesidad muy fuerte de trabajar para recuperara algunas cosas", consideró.
Forster explicó que "el gobierno de argentina tiene que tener una mirada sobre América Latina que no puede en ningún punto tocarse ni con Brasil, ni con Perú ni con Chile ni con ninguno de los países que hoy representan la condición neoliberal en el continente. Hay que repensar algunas cosas".
