La abogada del caso María Ovando, Roxana Rivas, explicó en diálogo con Luis Bremer los pormenores de su condena, en la que se la acusa de no haber evitado el abuso sexual de sus dos hijas.
“María está con una condena de 20 años que no está firme y que implicó la detención inmediata a pesar de que había estado durante todo el proceso en libertad. Esta en el pena de Posadas a más de 200 kilómetros de su casa, lo que hace difícil que la familia pueda verla”, contó Rivas.
“La causa no tiene ninguna prueba, lo único real es que esas niñas fueron abusadas, con la defensa manifestamos que los abusos podrían haber sucedido en la casa de los que hoy son sus guardadores”, detalló la abogada.
Además Rivas aseguró que “el caso del abuso que sufren en la casa de los guardadores está probado”, aunque explicó que el abusador fue condenado por abuso simple “porque la médica se rehúsa a hacerle el examen ginecológico obligatorio para supuestamente no revictimizarla”.
“Es muy alevosa y escandalosa la condena en este marco cuando no hay ninguna prueba en contra de María, inclusive el monto de la pena lo hace insostenible. En otros cas no condenan a más de 12 años de prisión”, concluyó.