La diputada Beba Soria, del Frente de Todos, defendió su voto a favor de la legalización del aborto, tras las duras críticas, amenazas y presiones que sufrió en La Rioja por ser la única legisladora provincial que se pronunció de esa manera.
"He recibido expresiones violentas que no tienen nombre. Es una forma de amedrentar a los senadores y senadoras", detalló en La Mañana.
El Colegio Médico Gremial de la provincia emitió un comunicado repudiando el discurso de la diputada en la sesión donde la interrupción voluntaria del embarazo logró la media sanción.
"En La Rioja nos conocemos mucho. Me sorprende lo que dice el Colegio Médico por mi voto. La reacción del patriarcado es fuerte", describió.
"Hay una reacción muy fuerte en las redes por mi voto a favor de la legalización del aborto. Me lo esperaba, la reacción del patriarcado es fuerte en La Rioja", agregó la diputada nacional.
Además, indicó que la sociedad pidió a legisladoras y legisladores que estén a la altura de las circunstancias. "Estoy en desconstrucción y cumplí con el mandato popular", puntualizó.
Soria fue la única diputada de la provincia que votó a favor de la legalización del aborto y su discurso del jueves durante el debate fue emotivo, entre otros aspectos, porque hizo una alusión a su fe religiosa. "Soy católica apostólica romana, juré en el cargo por la memoria de nuestro obispo mártir Enrique Angelelli, digo que mi voto será afirmativo y que Dios, que ve en mi corazón, me lo demande", sostuvo.
En aquella ocasión señaló que "la interrupción voluntaria del embarazo" la "atraviesa como mujer, como cristiana y como trabajadora por los derechos de las mujeres vulneradas".
Pero con el correr de las horas, luego de expresarse a favor de la legalización del aborto, Soria comenzó a recibir advertencias y amenazas a través de las redes sociales.
Esta mañana, el gobernador riojano, Ricardo Quintela, expresó su solidaridad e indicó que "debe primar el respeto por la decisión política y por la persona de quienes nos representan".