Alberto Fernández descartó un “toque de queda”, pero advirtió que “si el relajamiento sigue” habrá nuevas restricciones
El presidente Alberto Fernández se mostró preocupado por el aumento de contagios de coronavirus registrado en las últimas semanas y anticipó que “si la situación no afloja” las fuerzas de seguridad “empezarán a actuar en la calle para disipar a la gente e impedir aglomeraciones”.
Fernández descartó además la imposición de un “toque de queda” o cuarentena estricta tras el incremento de contagios y fallecidos reportados a diario en las últimas dos semanas.
Ayer el Presidente se volvió a reunir con el gobernador bonaerense, Axel Kicillof, y el jefe de Gobierno, Horacio Rodríguez Larreta, para analizar la situación sanitaria.
“Si vemos que la situación no afloja y el relajamiento sigue, vamos a ver de qué modo las fuerzas de seguridad empiezan a actuar en la calle para disipar a la gente e impedir aglomeraciones”, advirtió.
En este sentido, explicó que en la reunión con Rodríguez Larreta y Kicillof acordaron volver a reunirse la semana que viene para “hacer un seguimiento”.
“El problema no ha terminado, también está la dificultad en la Costa Atlántica con el turismo. Mar del Plata no la está pasando bien, vamos a dejar que pase fin de año y luego mirar con lupa cómo resolvemos esto”, indicó Fernández.
De todos modos, aclaró que el gobierno no implementará un “toque de queda”, aunque sí un “toque sanitario, que fue algo que funcionó en muchas ciudades del interior”.
Este artículo fue publicado originalmente el día 10 de agosto de 2022