En su columna, Fernando Borroni reflexionó sobre el caso de la diputada provincial de Juntos por el Cambio, Carolina Píparo, y de su marido, quienes atropellaron a dos motociclistas luego de haberlos perseguido porque supuestamente habían sido víctimas de un robo.
“Este hecho se instaló desde los algunos medios de comunicación y algunos sectores de la política como una excusa para justificar la justicia por mano propia y el sálvese quien pueda”, dijo el periodista de La Mañana. “Píparo dijo ´me robaron 6 motochorros´, como si eso fuese argumento suficiente para comenzar una persecución a los supuestos delincuentes” agregó.
“Esta sociedad solo justifica el accionar violento de un hombre o de una mujer si su condición social y económica ha sido legitimada por la sociedad. Entonces puede reclamar y ser violento. Vivimos bajo un criterio de justicia estandarizado. Bajo un criterio de dolor estandarizado y de violencia estandarizada. Esa estandarización no es otra cosa que la construcción cultural de un modelo que nos dice que si el violentado es un hombre o una mujer constituida por los parámetros del modelo toda reacción es justificada, pero cuando le pasa a los marginados, esa reacción es violencia”.
