Esta semana la ANMAT aprobó la fabricación del primer test argentino para la detección rápida de anticuerpos de coronavirus. El desarrollo del test fue realizado gracias al trabajo conjunto entre la empresa recuperada Farmacoop y el sistema universitario nacional.
Las tiras reactivas del test permiten saber en cinco minutos si una persona tuvo o tiene coronavirus, un aspecto clave para realizar estudios poblacionales a gran escala, mapeo y segregación de áreas.
“El desarrollo se hizo entre el Cindefi , que es un instituto del Conicet de la Universidad Nacional de La Plata, una empresa privada nacional que se animó a invertir y nosotros que pusimos la planta y el desarrollo de la producción”, afirmó Bruno Di Mauro, del laboratorio recuperado Farmacoop, en comunicación con La Mañana.
Di Mauro contó que Farmacoop es una empresa recuperada continuadora del laboratorio Roux-Ocefa, que en 2018 entró en quiebra dejando a más de 500 trabajadores en la calle.
En el 2019, tras meses de militancia y lucha, la Justicia les dio la posibilidad a los trabajadores de recuperar el laboratorio y reactivar la producción.
“Con el desarrollo del test demostramos que los trabajadores somos capaces de gestionar este tipo de empresas tan complejas y que no tenemos nada que envidiarle a nadie. Ahora estamos tratando de apostar a sumar en soberanía productiva en apostar a los desarrollos nacionales”, expresó Di Mauro quien contó que actualmente el laboratorio logró reincorporar a 100 trabajadores.
“De a poco vamos sumando sectores productivos y habilitaciones. Tenemos dos plantas productivas con capacidad de dar trabajo a 150 o 200 personas”, expresó Di Mauro.
En este sentido, remarcó que “con cada desarrollo se genera trabajo a distintas pymes y cooperativas que actúan como proveedores”, y contó que en el desarrollo del test articularon con distintas empresas nacionales.