El periodista, modelo y activista contra la gordofobia, Beltrán, pasó por Y ahora que estamos juntas y analizó el problema desde una perspectiva única.
De vez en cuando, vemos que los medios suelen levantar alguna noticia en la que la discriminación hacia los cuerpos gordos es habitual en lugares como los boliches.
La problemática de la gordofobia, sin embargo, es más frecuente de lo que se cree y muchas veces invisibilizada por las supuestas buenas intenciones en los comentarios que, en realidad, son manifestaciones de rechazo camufladas de falacias médicas y deseos de buena salud.
"Hay un rechazo sistemático", inquirió Beltrán con respecto a la forma en la que se observa a las personas cuando son discriminadas.
"A veces pensamos que la homofobia, la gordofobia es un insulto en la calle y, en realidad, todos estos son discursos que se configuran como discurso de odio y acciones puntuales de discursos de odio que exceden la idea de la discriminación más explícita del insulto", agregó al respecto.
Tal como el feminismo y su lucha contra el patriarcado que ese instala en lugares invisibles, la gordofobia cala en un estado más profundo de la sociedad en cuanto se patologizan los cuerpos que no entran dentro del estándar de delgadez o, incluso, con falacias científicas instaladas como el índice de masa corporal como índice de salud.
"Es un índice estadístico de la era industrial de Bélgica del año 1800, que se pensó para justamente poder censar la capacidad de una población de generar trabajadores varones", explicó al respecto.
"La medicina no puede ser el único rector de nuestra moral y nuestra ética social", reflexionó el activista.
"La medicina se ha equivocado a lo largo de la historia: lo que hoy en día llamamos feminismo, fue una enfermedad llamada histeria. Lo que hoy en día llamamos identidad trans, fue una enfermedad llamada disforia. Lo que hoy en día llamamos identidades no heterosexuales, fue una enfermedad llamada homosexualidad", agregó.
"La obesidad es una categoría del índice masa corporal que está pensada para cuerpos europeos del año 1800, no es una enfermedad", enfatizó.