La empresa petrolífera argentina logró el canje de su deuda y, así, evitar caer en el default.
El canje obtuvo una participación cercana al 32% de los acreedores de la totalidad de los bonos a reestructurar. Eso resultó en la emisión de nuevos títulos a 2026, 2029 y 2033, por aproximadamente 2.100 millones de dólares.
"El logro alcanzado por YPF redunda en una refinanciación temprana de pagos de capital e interés acumulado hasta diciembre de 2022 por un total de 630 millones de dólares, liberando recursos que podrán ser destinados a inversiones productivas según el plan dado a conocer semanas atrás", resaltó YPF en un comunicado.
"El grupo Ad Hoc da la bienvenida a la cuarta oferta de canje modificada en lo que se refiere a las obligaciones negociables de 2021. El grupo cree que la carta oferta de canje enmendada dará lugar a una resolución consensuada con los tenedores de las obligaciones negociables 2021, al tiempo que proporcionará a la compañía una flexibilidad de flujo de efectivo adicional y ahorros de intereses con respecto a sus Obligaciones Negociables 2021", había indicado el grupo liderado Blackrock, el gestor de fondos de inversión más grande del mundo.
YPF ofreció un rebalanceo entre la cantidad de bonos garantizados al 2026 y el dinero en efectivo que recibirán los bonistas que tienen actualmente la obligación negociable a 2021, lo que permitió adherirse a este grupo inversor.
La ventaja respecto de las propuestas anteriores es que los inversores cobrarán algo más de efectivo y algo menos de bonos garantizados a 2026, con lo cual aumenta el valor presente obtenido a través del canje. En el directorio de YPF indicaron que esta modificación no compromete la evolución financiera de la compañía.