La fiscal aseguró que el sistema judicial “sigue siendo deficitario” respecto de los casos por violencia de género.
La titular de la Unidad Fiscal Especializada en Violencia contra las Mujeres (UFEM), Mariela Labozzetta, cuestionó que “muchos operadores de Justicia” desconfían de las denuncias por violencia de género y familiar, y sostuvo que cada femicidio “es una interpelación permanente a repensare lo que falta en términos de prevención”.
Tras el crimen de Úrsula Bahillo, cuyo femicidio conmovió al país la semana pasada, Labozzetta pidió “evitar el sentimiento de que no se puede más respecto” de esos casos, y consideró que deben ser una “interpelación permanente para pensar y repensar lo que falta construir en términos de prevención”.
La fiscal especializada aseguró que “el sistema de Justicia sigue siendo deficitario en la respuesta que da a la problemática”, tanto en la atención como el acompañamiento a las víctimas, y el tratamiento y la investigación de estos crímenes. “Hay una falencia grande”, lamentó en diálogo con La Mañana, de Víctor Hugo.
En este sentido, resaltó que todavía muchos operadores y operadoras de Justicia desconfían de las denuncias por casos de violencia de género.
“Cuando alguien va a hacer una denuncia a una comisaría porque le robaron un celular el caso se procesa, se inicia la investigación, que no ocurre en los episodios de violencia de género”, comparó.
Labozzetta criticó que se parta de un “descreimiento e incredulidad” sobre las víctimas. “Hay prácticas judiciales, como el test de fabulación, que trata de definir si existen personalidades fabuladoras, que no se utilizan ante otros hechos delictivos”, agregó.
