En su editorial, Felicitas Bonavitta reflexionó sobre la actitud del gobierno de Horacio Rodriguez Larreta con respecto a la campaña de vacunación para mayores de 80 años.
Felicitas Bonavitta sostuvo que la saturación de las líneas para que las personas mayores de 80 años puedan inscribirse y vacunarse contra el coronavirus, era "un tema ineludible".
"Hace meses que en los diferentes distritos se empezaron a recibir estos datos y Larreta especuló hasta el último momento. Había que anotarse temprano, recibir la demanda de manera ordenada para no generar angustia y desconcierto" afirmó.
"Las vías virtuales y telefónicas colapsaron. Y por supuesto no es yapa ni muchísimo menos".
"Además del blindaje, Larreta tiene suerte. Sus propios opositores le facilitan una zona liberada desde ayer y está bien que así sea".
Bonavitta sostuvo que "no puede dar todo lo mismo, no se puede bancar, legitimar, ni avalar privilegios. Mucho menos en medio de una pandemia que ya superó las 50.000 muertes y menos si hablamos de acceso a la salud".
Respecto a que el lanzamiento del consejo económico y social que iba a ser el tema del fin de semana, afirmó que quedó afuera de la agenda.
"Los privilegios que tuvieron algunos, cientos, quienes para acceder a la vacuna con el llamado de un ministro es un tema que resulta escandaloso".
Es por esto que, según mencionó Bonavitta, es fundamental que lo sucedido sea tapa de todos los diarios.
"El porque fundamental tiene que ver con qué se espera del gobierno del Frente de Todos, el de Alberto Fernández, el de Cristina Fernández, el de las organizaciones, el de los millones de Argentinas y Argentinos que votaron porque querían que el país sea un país con políticas inclusivas".
"Sin privilegios para un par, de ahí venimos, con derecho a la educación y a la salud. Y la respuesta estuvo a la altura de las circunstancias".
"Sería un caso despreciable de abuso de poder, un sálvese quien pueda, lo contrario a lo que el presidente pregona: el acceso equitativo en el mundo de la vacuna. Pregona y practica".
"Lo que ocurrió ayer demuestra qué hay funcionarios que todavía no tienen en claro cuáles son las prioridades, que pueden tener las mejores intenciones pero no las prioridades ni el escenario político".