"En cierto modo es un disco sintético. Aunque hay una épica que no podemos evitar", asegura Nahuel Marquet, cantante de Degrade, la banda que fundó junto a Emiliano "Pato" Cattáneo y con la que esta noche presentará un nuevo disco, Balneario. Para el círculo cercano de la histórica agrupación rosarina, ésa epopeya sonora tiene nombre propio: "Nuestros amigos nos dicen que hay una épica degradiana. Y en este disco Dani Pérez aportó mucho a esa épica, abrió mucho el paisaje sonoro", distingue Marquet, que reconoce así la sintonía lograda con el cantante de Los Sucesores de la Bestia, que ofició como coproductor de una placa que pudo concretarse a partir de la plataforma de financiamiento colectivo Panal de Ideas, y que esta noche será lanzada formalmente en el Galpón de la Música (Estévez Boero 980), en un show que se anuncia a las 21.30 y abrirá con la actuación de Fede Leites.
Desde su fundación hace ya más de veinte años, Degrade fue liderada por Marquet y Cattáneo, que hace apenas unas semanas fueron reconocidos como Músicos Distinguidos por el Concejo municipal. Lejos de la apropiación absoluta del proyecto, la dupla encontró en este disco la posibilidad de seguir profundizando el valor grupal, a partir de la interacción con sus compañeros Guido Benvenuti (guitarras acústicas y coros), Pablo Giulietti (guitarras eléctricas), Lisandro Sagué (bajo) y Alvaro Manzanero (batería). "De hecho, en el disco no figuran los autores de los temas, porque en general fueron de creación colectiva --distingue Marquet--. Si bien los temas parten de una idea mía o de Pato, los chicos aportaron mucho. Por ejemplo, de entrada Pablo se planteó que no quería hacer capas de guitarra, sino una única guitarra de melodía, de contracanto. Y eso se nota, porque al mismo tiempo son guitarras que dialogan mucho con la melodía de la canción. Está buenísimo porque hasta Dani aportó a eso, porque el sonido es un instrumento más. El también aportó decisiones estéticas. Degrade siempre fue una banda democrática en ese sentido, puedo llevar una canción pero me encanta ver qué pasa cuando pasa por el efecto bola de nieve de la banda, sino las haría solo. Todos aportan".
En ese sentido, Balneario entra en una sintonía de producción que, desde la mirada de Marquet, va en línea directa con su antecesor. "Sobre el disco anterior dije lo mismo: Balneario tiene la ventaja, como toda producción independiente, de tener ciertas libertades. Es un disco que no pretende ser muy hitero, aun cuando quizás lo sea. Es un disco honesto, bastante maduro, que no pretende convencer a nadie, sino invitarte a un viaje. De un artista espero que me convenza, no escuchar nada forzado, y creo que Balneario es honesto, a flor de piel completamente. Creo que en este tiempo tuvimos experiencias fuertes y eso se escucha en el disco, que tiene una cohesión: en otros discos los temas míos y los de Pato están como más lejanos. Acá pudimos fusionar un poco más. Y creo que hay algo que es hermoso y es que ya suena a Degrade. Es un disco importante porque uno empieza a lograr una voz propia dentro de la diversidad. Ojo, quizás estaba desde antes. Pero al mismo tiempo uno no deja de cambiar. No creo que sea un disco más en el sentido de que suene igual que el anterior".
Con esos antecedentes, las perspectivas del grupo a futuro son más bien simples. "Me encantaría poder hacer un disco por año. Pero lo primero que nos pasó con este disco es que armamos los demos en un estudio que armó Pato en su casa, eso fue un punto de partida importante. Tenemos también ganas de empezar a trabajar en algo más chico, empezar a juntar canciones nuevas, que pueden ser para un disco mío, para algo nuevo de la banda. Ahí ya hay un lugar más concreto para trabajar", admite Marquet, que remarca: "No hay un objetivo claro. El otro día, cuando nos distinguieron en el Concejo lo que dije fue que en cierto modo era un reconocimiento al amor que tuvimos por esta causa, por este proyecto. En cierto modo Degrade es el lugar más importante donde vuelco mi música, y la música es la razón de mi vida. Eso es lo que da la vigencia, hacer discos, salir a tocar en vivo nuestra música de la mejor forma posible, que me haga feliz cuando lo haga y vea que hay alguien disfrutándolo, ya sean 500 o 50 personas. Espero que sigamos sacando discos, seguir tocando y que a la gente le guste. Eso ya es un gran proyecto. Todo hecho con esa razón de vida, con amor, con una fuerza muy grande en nuestra lírica, que puede gustar o no, pero que tiene honestidad".