En "Vida", la autobiografía del músico Keith Richards, recientemente reeeditada en la Argentina por Planeta, se cuenta el nivel de violencia y marginalidad que tenían los primeros tours de los Rolling Stones por Estados Unidos. En Fue el Mayordomo, Diego Marinelli repasó la carrera criminal de la banda.
En Estados Unidos, los Stones protagonizaron un montón de cacerías por parte de la policía, sobre todo en el sur del país. "Una gran fuente de problemas con las autoridades locales eran obviamente las drogas, pero también la fascinación que los Stones tenían con la música y la cultura negra", explicó Marinelli.
Se movían en los barrios negros e invitaban a músicos negros a acompañarlos por lugares en los que estaba prohibido que ingresaran afroamericanos. "Y los personajes que se subían a esas giras eran una tropa muy pesada, de dealers, plomos y vividores que llevaban el caos ahí por donde iban".
En la voz del actor Luis Ziembrowski y con fragmentos del propio Keith Richards, repasamos tres hitos de los Stones contra la ley durante su gira por Estados Unidos.
El arresto de 1967
El arresto más recordado y que dividió a toda la sociedad británica ocurrió el 12 de febrero de 1967, el primer encuentro oficial con la ley por parte de los músicos. Mick Jagger y Keith Richards se encontraban en una fiesta organizada por este último en su casa de Redlands cuando, de manera sorpresiva, el escuadrón antidrogas de Inglaterra ingresó a la propiedad para arrestar a los músicos.
Así, el 29 de junio de 1967, la corte de Inglaterra sentenció a Jagger a tres meses de prisión y a Richards a un año. Dicha decisión fue apelada de inmediato por los músicos.
A los pocos días, una editorial del diario ‘The London Times’ cambió por completo las vidas de los integrantes de The Rolling Stone. En ella se argumentaba que la banda estaba siendo acusada sin razón debido a la fama y el éxito que estaban teniendo en ese momento, situación que cambió la opinión pública de ese entonces. Un mes después de la sentencia, Mick Jagger y Keith Richards fueron puestos en libertad.
Arresto a Keith Richards en Canadá
En febrero de 1977, la policía canadiense encontró casi 30 gramos de heroína en su habitación de hotel. Acusado de posesión con la intención de tráfico, y enfrentando una temporada posiblemente larga en la cárcel, Richards pagó la fianza y se agenció una visa especial que le permitía hacer un tratamiento experimental por adicciones en Estados Unidos.