Estados Unidos decidió apoyar la liberación de las patentes de las vacunas contra el coronavirus, una posición que hasta ahora tanto ese país como las potencias europeas y varios de sus aliados más cercanos vetaban pese a la creciente escasez de dosis en casi todo el planeta.
A través de un comunicado presentado ante la Organización Mundial del Comercio, la representante estadounidense, Katherine Tai, alegó que “las circunstancias extraordinarias de la pandemia exigen medidas extraordinarias”. Ante esta situación Tai dijo que "el Gobierno cree firmemente en las protecciones de la propiedad intelectual, pero, en aras de poner fin a esta pandemia, apoya la exención de esas protecciones para las vacunas contra el covid-19",
En diálogo con Las Primeras Noticias, la investigadora del CONICET, Nuria Giniger, afirmó que “la liberación de las patentes es una necesidad de la Humanidad”. “Hay mucha desigualdad en la distribución de vacunas. Hay países que aún no recibieron ni una sola dosis”, aseguró.
"Parece que en Estados Unidos se han dado cuenta que nadie se salva solo", dijo Giniger. “Si se liberan las patentes habrá más laboratorios produciendo vacunas. Hoy sólo son diez laboratorios los que las producen”, puntualizó.
La investigadora recordó que antes de la declaración de Estados Unidos había 130 países pedían por la liberación de las patentes. Además explicó la liberación de las patentes no resuelve el problema, porque hace falta transferir tecnologías.