Las vacunas Sputnik Vida fabricadas en Argentina comenzaron a atravesar con éxito los estrictos controles de calidad del Instituto Gamaleya de Rusia, un paso fundamental para que se inicie la producción local del principio activo en el laboratorio Richmond.
Según adelantaron fuentes del Ministerio de Salud y de Casa Rosada a AM750, si los desarrollos continúan a este ritmo en las próximas semanas podrá comenzar la producción a gran escala en el laboratorio de Richmond en la localidad de Garín.
Los estudios preliminares fueron realizados en 21.176 dosis que partieron semanas atrás a Moscú, donde son analizadas minuciosamente por los desarrolladores de la Sputnik V en Rusia, que deben aprobar el proceso de producción nacional.
Según confiaron a este sitio fuentes de la cartera que conduce Carla Vizzotti, en una primera instancia la Sputnik Vida tendrá el componente activo importado desde Rusia, aunque el objetivo es que desde diciembre sea fabricado también en Argentina, por lo que todo el proceso de la vacuna se concretaría en el país.
Hace tres semanas se enviaron las muestras en el marco de un viaje a Moscú, del que además de Vizzotti y la asesora presidencial Cecilia Nicolini participó el empresario y CEO del Laboratorios Richmond, Marcelo Figueiras.
Las Sputnik, de Moscú a Garín
"Hay muy buenas perspectivas, está muy avanzado todo para para comenzar en las próximas semanas", señalaron a este medio cerca de Alberto Fernández.
De ser así, se podría comenzar con una producción de un millón de dosis mensuales hasta alcanzar los cinco millones por mes, todas destinadas a la Argentina.
El acuerdo entre Richmond y el Fondo de Inversión Ruso fue firmado en febrero pasado y en abril se enviaron las dosis para su análisis.
Ahora, se aguarda el comunicado del laboratorio dando cuenta de todos los controles aprobados. Una vez que se cumplan todos los pasos, Argentina se convertirá finalmente en el primer país americano en producir la vacuna rusa contra el coronavirus.