Organizaciones sociales y organismos de Derechos Humanos denunciaron que el Gobierno de Horacio Rodríguez Larreta incumplió acuerdos firmados en diciembre de 2020 sobre la metodología para relevar a las personas en situación de calle en la Ciudad de Buenos Aires. Además, hablaron de agresiones y episodios de violencia previo al censo.
Este martes desde el Ministerio de Desarrollo Humano y Hábitat, junto a la Dirección General de Estadísticas y Censos de la ciudad, realizaron el censo anual. El operativo se llevó a cabo en una sola noche y sin la participación de organizaciones e instituciones que trabajan con esa población, tal como se había acordado a finales del año pasado.
La denuncia fue realizada en un comunicado que lleva las firmas de la Asociación Civil por la Igualdad y la Justicia (ACIJ); el Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS); Proyecto 7, que trabaja con personas en situación de calle; el Movimiento de Trabajadores Excluidos; y el Movimiento Popular Nuestramérica.
"Mientras estábamos discutiendo la metodología del censo, nos enteramos que el gobierno porteño había puesto una fecha para su realización de manera unilateral", contó Horacio Ávila, referente de Proyecto 7, en diálogo con AM750. En este sentido, expresó que las autoridades porteñas "nunca tuvieron la intensión de hacer el censo en conjunto". "Ya tenían pensado todo el operativo con fecha y todo", agregó.
Por su parte, Daniela Camozzi, de la organización No tan distintes, que integra la Asamblea Popular por las personas en situación de calle, explicó que una de las principales diferencias con la Ciudad en cuanto a la metodología estuvo en la cantidad de días en la que se debería realizar el censo.
"Nosotros proponíamos un censo de varios días y en distintas franjas horarias y la ciudad lo terminó haciendo en una sola noche", explicó.
Además, Camozzi indicó que las autoridades porteñas realizan el censo en una sola jornada, por lo que al recorrer una sola vez y en un solo horario un determinado punto se "desconoce la dinámica itinerante de las personas en situación de calle". "Son personas que tienen que ir y venir para buscar lo básico para subsistir", agregó Camozzi.
"En la Ciudad hay una política perversa que lleva a un subregistro de las personas en situación de calle", puntualizó.
En este sentido, recordó que "los resultados del censo no van a ser los que deberían ser" y advirtió: "La Ciudad realizó el censo en una sola noche en un horario donde claramente no hay circulación de personas".
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Violencia en la previa a los censos
Camozzi denunció además que previo a la realización del censo, se registraron distintos casos de violencia para echar a las personas de situación de calle de la Ciudad.
"A algunas personas les reventaron las ranchadas antes del censo para que haya menos gente en situación de calle, si vos lo levantas", sostuvo.
Un censo hecho en el pico de la pandemia
Ávila también reprochó que la ciudad haya decidido realizar el censo en medio de la segunda ola de contagios de coronavirus mientras rige un decreto presidencial con restricciones a la circulación.
"La población de calle y nocturna se modificó sustancialmente durante las nuevas restricciones porque los compañeros tiene miedo de que los metan en cana o los caguen a palos", contó el referente de Proyecto 7.
"Nosotros planteábamos la realización de un censo mucho más responsable y seguro. Proponíamos realizar el censo en otro momento de la pandemia y en varios días para no exponer a los compañeros y a los voluntarios a los contagios", agregó.
Crecimiento de la pobreza
Tanto Camozzi como Ávila coincidieron que en los últimos meses se ha registrado un incremento de las personas en situación de calle.
"Desde el último censo popular que realizamos en 2019 creció al menos un 30 por ciento la cantidad de personas en situación de calle en la Ciudad de Buenos Aires", dijo Ávila. "En la olla popular que realizamos en la plaza del Congreso la mayoría de las personas nos cuentan que se quedaron en la calle en los últimos meses", agregó.
Por su parte, Camozzi dijo que, si bien no cuentan con número certeros, registraron un incremento en la cantidad de personas que acuden a los comedores. "Nos estamos quedando sin comida para dar", contó.
