La vacuna israelí BriLife realizará sus estudios en fase tres en el país para, luego de pasar por el proceso de confirmación de su seguridad y eficacia, sea elaborada en Argentina y distribuida en todo el mundo.
Una comitiva de Hospital Hadassah de Israel- que junto al Instituto Israelí de Investigación Biológica desarrolla la vacuna- mantuvieron una reunión este lunes con la ministra de Salud, Carla Vizzotti, el jefe de Gabinete de la Nación, Santiago Cafiero y la asesora presidencial, Cecilia Nicolini, para avanzar en la en los puntos claves del acuerdo.
La investigación de la vacuna requiere de la participación de 40 mil voluntarios de distintos países.
Según anticipó la jefa de gabinete del Ministerio de Salud de la Nación, Sonia Tarragona, “en los próximos días se avanzará en pulir la letra fina, de ultimar detalles, para avanzar en las pruebas de su candidato vacunal en nuestro territorio”.
“Ya se hicieron muchos ensayos clínicos en Argentina. Pfizer, Sinopharm, CanSino y Janssen, entre otros. La parte israelí, a medida que avancen las pruebas de fase 3, mantendrá conversaciones con empresas privadas argentinas para acordar las pautas de la futura producción”, agregó.
Además, explicó que nuestro país podría fabricar la vacuna “full-cicle”, es decir, producir desde el principio activo hasta el envasado, o bien concentrarse en una sola parte del proceso. “Para esas definiciones todavía falta tiempo. Nuestra nación tiene la chance de completar cualquier parte de la cadena de fabricación”, subrayó la funcionaria.