Según trascendió en una reunión del Buró Político del Comité Central del Partido Comunista del país, China apoyará a las parejas que deseen tener un tercer hijo, con el objetivo de mejorar la estructura de la población del país asiático, como así también responder activamente al envejecimiento demográfico y preservar las ventajas del país en recursos humanos.
Xi Jinping, secretario general del Comité Central del Partido Comunista de China, presidió la reunión en la que se presentaron informes sobre las principales medidas políticas para abordar activamente el envejecimiento de la población durante el período del XIV Plan Quinquenal (2021-2025). En el encuentro se examinó una decisión sobre el mejoramiento de las políticas de natalidad con el fin de promover un crecimiento poblacional equilibrado a largo plazo.
China tiene una población numerosa y su grado de envejecimiento ha ido en aumento durante los últimos años. En la reunión reconocieron el progreso de las principales políticas de natalidad adoptadas por las autoridades centrales del Partido desde el XVIII Congreso Nacional del PCCh en 2012.
En dicho año se delineó lo aprobado en 2013 respecto de que las parejas tuvieran un segundo hijo si alguno de los padres era hijo único. En tanto que en 2016 se permitió que las parejas casadas tuvieran dos hijos, eliminando gradualmente la política del hijo único.
Durante la reunión se hizo un llamado a llevar a cabo esfuerzos para implementar una política del tercer hijo de acuerdo con la ley y avanzar en la alineación de las políticas de natalidad con las políticas económicas y sociales relevantes.
Entre las medidas de incentivo incluyen la proporción de educación y orientación para promover el matrimonio y los valores familiares entre los jóvenes en edad de casarse; también esfuerzos para mejorar los servicios de atención prenatal y post-natal, el desarrollo de un sistema universal de servicios de cuidado infantil, la promoción de la equidad en la educación, el aumento de la oferta de recursos docentes de calidad y la reducción del gasto familiar en educación.
La carga económica de alquilar o comprar una casa para albergar a familias más numerosas, los costos de educación y el costo de vida en general influyen en la decisión de muchas parejas de tener un único hijo.
Jean-Pierre Cabestan, profesor de la Universidad Bautista de Hong Kong, explicó que el hecho de permitir a las parejas tener un tercer hijo no implica que eso suceda efectivamente: "En 2016 el gobierno ya había relajado la política de único hijo y habilitó a tener dos, pero los resultados no fueron buenos. Las parejas jóvenes, si es que se casan, pocas veces desean tener un hijo".
La reciente encuesta de la agencia Xinhua Weibo sobre si "estaban listos para un tercer hijo?" va en esa línea. Se recogieron 29.000 respuestas negativas sobre 31.000.
El censo 2021 con resultados del reciente mayo refieren que la población china atraviesa la más importante desaceleración de la población y no supera la barrera de los 1.41 billones de personas.
Había sido en 1979, bajo el temor de una explosión demográfica que China implementó la política de hijo único, lo cual condujo a esterilizaciones coercitivas y abortos según el sexo del feto y a una predominancia del sexo masculino por sobre el femenino.