El actor Ariel Staltari, habló sobre el reestreno de la serie argentina Okupas en la plataforma Netflix este 20 de julio y destacó el momento de amistad y camaradería que se vivió en las grabaciones del programa argentino.
Okupas significó una bisagra en la ficción nacional allá por el año 2000. En medio de la decadencia económica y social, Bruno Stagnaro retrató lo que vivían los jóvenes de aquel momento, lejos de la comedia costumbrista arraigada en programas como, por ejemplo, Gasoleros.
La historia que sigue a cuatro amigos, Ricardo (Rodrigo De La Serna), un chico de clase media, El Pollo (Diego Alonso Gómez), Walter (Ariel Staltari) y El Chiqui (Franco Tirri), mostraba el día a día de estos personajes en una vieja casona de la Ciudad de Buenos Aires en la que se mezclaba la marginalidad, las drogas y el coming of age autóctonos, mientras se forjaba una amistad dentro y fuera de la ficción, paradójicamente, y lanzaba al estrellato a el -hasta entonces- poco conocido De La Serna.
En diálogo con Pasajera en Trance, el actor que dio vida a Walter, ese rollinga entrañable, Ariel Staltari, destacó que "Okupas se merecía estar en un lugar donde los fans pudieran verla en una buena calidad" de imagen y audio y agregó que el grupo de actores que conformaba con los demás en la serie "tenía una mística de amateurs, estábamos muy hermanados".
"Estábamos -sin saberlo algunos- haciendo algo que iba a marcar un antes y un después en la manera de contar en la ficción. Y eso es lo que quiero rescatar. La verdad que fuimos un grupazo, no había divismo", señaló.
Además contó que, Rodrigo De La Serna, que venía ya con una carrera en televisión, le aconsejaba "que disfrute", pero Staltari argumento que, seguramente, "hasta él mismo se habrá sorprendido de todo lo que sucedió" con la serie.
"Creo que por eso también salió bien, porque nos dedicamos a jugar. Lo que preponderaba en Okupas es que éramos niños divirtiéndonos", recordó.