El ministro de Transporte, Alexis Guerrera, informó ayer que el presidente Alberto Fernández firmó un decreto por el cual se faculta a la Administración General de Puertos a llamar a una licitación corta" para las tareas de mantenimiento de la red fluvial troncal del Río Paraná, llamada Hidrovía, por el término de 12 meses. Por ese lapso, "el sistema va a estar bajo control estatal, en cabeza de la AGP", señaló el ministro.
“Se está trabajando para asegurar el mantenimiento del servicio de la Hidrovía Paraná-Paraguay durante un año. De esta manera podemos contar con el tiempo suficiente para preparar una licitación grande y así garantizar la navegabilidad", agregó Guerrera.
En diálogo con La Mañana de Víctor Hugo, el presidente del Astillero Río Santiago, Pedro Wasiejko, dijo que el control del Estado sobre la Hidrovía "es un paso importante".
Wasiejko recordó que desde 1995 la Hidrovía estuvo en manos del sector privado de manera absoluta. "El Estado no tenía participación. Los privados decidían desde el peaje que se cobraba hasta las obras que se realizaban", señaló.
El titular del Astillero Santiago, señaló que con la decisión del ejecutivo, la recaudación de la Hidrovía se hará a través de un ente estatal. "Está decisión favorecerá a los productores locales y a la industria nacional", sostuvo.
En ese sentido, Wasiejko señaló que la administración de los privados era más cara para los productores comparado con lo que sucede a nivel internacional. "Acá se cobraba 3.06 dólares por tonelada cuando la media internacional es de 2.06 dólares la tonelada", expresó.
El fin de la concesión
El fin de la prolongación de la concesión en los términos que rigieron en los últimos 25 años y el cobro del peaje o canon a cargo de un organismo del Estado son las reivindicaciones centrales que plantea desde hace tiempo un sector del Frente de Todos por el fin de la concesión.
La actual concesión está en manos del consorcio que conforman la empresa belga Jan de Nul y la local Emepa, de Gabriel Romero.
Según publicó Página/12, la intención de la compañía belga es continuar prestando el servicio de dragado, aunque también trascendieron las diferencias "insalvables" que mantiene con su socio, Emepa, por lo cual es más que probable que no se vuelvan a presentar juntos. Emepa se ocupa del balizamiento del río, una tarea que no requiere de tecnología internacional para su realización.