En su columna de La Mañana, Fernando Borroni repasó las banderas, los argumentos y las chicanas que utilizará la oposición en la campaña electoral y ensaya las líneas que puede trazar el oficialismo para lograr la victoria.
La campaña electoral ya empezó. Nos preguntamos cuál será su recorrido comunicacional, qué vamos a discutir. La oposición va a apelar a la emoción por su incapacidad de argumentación, por su incapacidad de proponer, por una incapacidad de sumarle razón y razonabilidad a la política, a su gestión de gobierno.
Después del saqueo y de la estafa que Juntos por el Cambio llevó adelante durante sus cuatro años de gobierno, les es muy difícil poder hablar de economía, poder hablar de cultura, poder hablar de política y de salud. Entonces apelan a la emoción, aquello que se nos escapa a todos de las manos porque a veces no surge desde la inconsciencia.
La emoción será puesta en medio del escenario, el miedo, el odio. Este será su juego frente a ello la importancia de no solamente denunciar lo que ha significado y lo que significa la derecha gobernando sino también hablar de futuro, hablar de esperanza.
En esta oportunidad el gobierno del campo nacional y popular debe confrontar con la oposición en relación a la simbología de lo que es la vida frente a la muerte. Porque la oposición busca volver responsable a Alberto Fernández y a este gobierno de cada una de las muertes por la pandemia. Ustedes son la muerte, dice la oposición ustedes son el hambre, ustedes son la corrupción, ustedes son el autoritarismo, ustedes son los chorros, esto lo vienen diciendo sistemáticamente.
Cuando el odio nace y se concibe desde la integridad de la oposición, la discusión política es entre el relato de la vida y el relato de la muerte.