Más de cien científicos del Reino Unido y Estados Unidos, advirtieron que la estrategia del primer ministro Boris Johnson de reabrir aún más la nación eliminando todas las restricciones impuestas por la pandemia, es "una decisión peligrosa y prematura" que puede poner en riesgo a todos, incluidos los que ya están vacunados.
En un documento publicado por la revista científica The Lancet, los científicos argumentaron que con esta estrategia, en medio de una tercera ola de la pandemia que se afianza en el Reino Unido, uno de los países más golpeados de Europa, se corre además el riesgo de crear una generación con problemas de salud crónicos y discapacidad, cuyos impactos personales y económicos podrían sentirse en las próximas décadas.
Con un acumulado de más de 5 millones de contagios y más de 128.500 muertos por coronavirus, el Gobierno británico decidió que el 19 de julio, denominado como el "Día de la Libertad", finalicen casi todas las restricciones en Inglaterra.
"Con está decisión está implícito que las infecciones aumentarán, pero que esto no importa porque las vacunas han roto el vínculo entre infección y mortalidad. Creemos que esta decisión es peligrosa y prematura", escribieron los especialistas.
El 25% de los fallecidos en Inglaterra recibió las dos dosis de la vacuna contra el coronavirus
En sus redes sociales, patóloga pediátrica argentina Marta Cohen, quien actualmente reside en el Reino Unido, compartió su preocupación ante la reapertura y advirtió que las vacunas que se utilizan en Inglaterra son menos efectivas contra la variante Delta.
"Se esperan como mínimo 100 mil infecciones diarias. Sabemos que las vacunas son menos eficientes para la cepa Delta que es la que actualmente circula en Europa", expresó Cohen quien estimó que si se liberan las restricciones podría haber más de 1400 internaciones diarias colapsando el sistema de salud de Inglaterra.
"La Vacuna de Oxford- AstraZeneca tiene un 67 % de eficacia. Es decir que de cada 100 personas 33 vacunados con dos dosis no adquieren la inmunidad. De cada 100 personas vacunadas con la vacunas de Pfizer, 22 no van a tener inmunidad", puntualizó la especialista. "Por ese motivo se observa que un 25 por ciento de las personas que fallecen por coronavirus son personas a las que se le aplicó las dos vacunas", agregó.