La abogada y Directora de Asuntos Jurídicos del Senado, Graciana Peñafort, habló sobre la reforma judicial y subrayó la importancia de alejar a los tres poderes del Estado de injerencias mediáticas y económicas.
“La justicia es una virtud inscrita en el corazón del hombre, aunque no siempre se cumple. Creo en la justicia, pero no siempre la encontramos en el Poder Judicial”, expresó Peñafort en diálogo con Pasajera en Trance.
En esa línea, aseguró que ese órgano estatal debe ser reformulado a la luz de los intereses mediáticos y económicos que permearon su funcionamiento en los últimos años: “Hay que pensar un Poder Judicial que tenga la forma y las herramientas para alejarse de las interferencias de poderes que no son los poderes del Estado”, apuntó.
Peñafort se refirió, en ese sentido, a las causas contra exfuncionarios del kirchnerismo que se abrieron a partir de 2015 y afirmó que, en su momento, “atisbó” la persecución judicial que vendría una vez finalizado el mandato de la expresidenta Cristina Kirchner.
“Lo que no pude dilucidar entonces era el nivel de permeabildiad, costaba pensar el nivel de retroceso en términos de garantías y derechos que había sufrido el Poder Judicial”, contó.
“El problema no era Bonadío, que era un mal juez lo sabíamos desde que encubrió a los encubridores de a AMIA. Lo que no sabíamos es que también habían permeado las instancias superiores de control. Un mal juez se corrige, pero sin instancias de control no hay Poder Judicial justo”, subrayó la abogada.
Por último, Peñafort se refirió a la posible transformación del estado actual de situación de la justicia nacional y aseguró que es “la política en su conjunto”, tanto con dirigentes oficialistas como opositores, quien debe hacerse cargo de los cambios necesarios.
“Hay que dejar esa conducta infantil de cerrar los ojos y encarar la tarea de solucionarlo de manera eficiente y clara. Sin un Poder Judicial verosímil, la justicia pierde el hábito y, cuando eso pasa, finalmente la factura de esa falta de arbitraje la paga la sociedad y la conducción política”, concluyó.