El locutor Víctor Hugo Morales reflexionó sobre "la forma mafiosa de conducirse" de Mauricio Macri denunciado por toda su familia en el libro "Hermano" de Santiago O'Donell y sobre "el horror informativo que significa que Clarín, La Nación, los medios no digan una sola palabra". En ese contexto, comentó la película "Secretos de Estado" en su programa La Mañana por AM750 y llamó a pensar en "los secretos que no pueden salir a la luz aunque lastimen a los habitantes".
"Lo que salió a decir Adolfo Rubinstein es tan pianta votos para la derecha. Seguro porque debe estar resentido con Manes. Si fuéramos serios a la hora de votar como ciudadanos, ante la confesión de Rubinstein. Vamos a charlar más adelante sobre eso, sobre los Macri, sobre Mariano y del horror informativo que significa que Clarín, La Nación, los medios no digan una sola palabra, no les importa toda la denuncia de la forma mafiosa de conducirse de Mauricio Macri denunciado por su propia familia.
Anoche estaba mirando una película y me pregunté, ¿qué hacemos cada mañana cuando somos críticos de lo que pasa en Argentina, en el mundo con los horrores que hubo? Ví la película "Secretos de Estado" en Amazon Prime, con Keira Knightley, que es la joven de la vida real que pasó un dato de la inteligencia británica antes de la guerra de Estados Unidos con Irak.
Cuando uno ve lo que hizo Estados Unidos, lo que le hicieron al mundo Tony Blair como alcahuete de George Bush y lo que hizo Dick Cheney, uno dice: "Ni antes ni después puede encontrar una monstruosidad igual". Mataron a 700 mil personas. Nosotros peleamos por candidaturas, temas baladíes frente a esto. EE.UU. asesinó a 700 mil civiles y lo hicieron a sabiendas.
La película cuenta como una joven entrega al periodismo un dato confidencial de la inteligencia británica en la cual queda demostrado un pedido de los Estados Unidos de meterse en la vida de los que tienen que votar en la ONU para cambiarles el voto, para que voten a favor de la guerra. Extorsionarlos para que votaran contra sus convicciones para matar a 700 mil personas mínimo. Es un ataque espantoso de la historia de la humanidad. Me puse a pensar si había algo peor que esto. Con toda la intención del borracho Bush y de Dick Cheney, un atorrante puso de vicepresidente.
El film transcurre con lo que significó para esa joven el dato que entregó y lo que le puso haber costado. Pero hay un dato interesante: en Gran Bretaña desde 1989 no se puede denunciar a un gobierno británico aunque esté haciendo el mal. Margaret Thatcher a partir del asesinato del Belgrano, que debería ser recordado como un asesinato y darle mucha publicidad porque los propios ingleses lo tienen asumido, es denunciada por una persona que podía hacerlo porque era factible dentro del plano legal. Cuando llega el 2003 era delito denunciar aquella. Thatcher había conseguido que lo que diga el Estado sea lo que valga. Aunque el Estado esté perjudicando a la gente con una guerra, aunque se denuncie el crimen de lesa humanidad cometido contra Irak, no se puede decir.
Son secretos que no pueden salir a la luz aunque lastimen a los habitantes. El final también es muy interesante para ver dónde le aprieta el zapato al mundo de la política cuando se dicen las verdades. Piensen, seguramente en el desarrollo de la película, qué mundo habitamos para entender lo que después se vuelven las pequeñas cosas cotidianas".