El presidente estadounidense Joe Biden se refirió este lunes a la situación crítica que vive Afganistán ante el avance talibán y aseguró que para Estados Unidos "nunca fue un objetivo construir una nación" en el país de Medio Oriente.

"Fuimos a Afganistán hace casi 20 años con objetivos claros: atrapar a los que nos atacaron el 11 de septiembre de 2001 y asegurarnos de que Al Qaeda no pudiera usar Afganistán como base desde la cual atacarnos nuevamente", aseveró.

Y subrayó: "Lo hicimos. Se desarticuló a Al Qaeda y Afganistán. Nunca abandonamos la búsqueda de Osama bin Laden y lo atrapamos. Eso fue hace una década. Construir una nación en Afganistán nunca fue un objetivo de Estados Unidos."

En esta línea, el mandatario demócrata remarcó que la misión nunca fue la creación de "una democracia unificada y centralizada", sino evitar los "ataques terroristas" contra suelo estadounidense.

Asimismo, defendió "por completo" su decisión de la retirada militar de Afganistán con vistas al 11 de septiembre, pese al caos desatado en la capital afgana, aunque reconoció que la toma del país se produjo "más rápido de lo anticipado".

"Respaldo por completo mi decisión. Después de 20 años, he aprendido de la manera más dura que nunca es buen momento para retirar las tropas estadounidenses", dijo Biden.

Por otro lado, apuntó contra los insurgentes y amenazó que si los talibanes "atacan a al personal o se entrometen" en la operación de rescate, la respuesta "será enérgica e inmediata". "Defenderemos a nuestra gente con fuerza devastadora", añadió.

"No lamento mi decisión de ponerle fin a la presencia estadounidense en Afganistán. Yo no le voy a pedir a nuestras tropas que peleen indefinidamente en la guerra civil de otro país", reflexionó.

Finalmente, el jefe de Estado norteamericano manifestó que las escenas que se vieron en los últimos dos días "son desgarradoras", particularmente para los veteranos, diplomáticos, trabajadores humanitarios, y "para cualquiera "que haya pasado tiempo trabajando para apoyar al pueblo afgano.

"También lo es para aquellos que han perdido seres queridos en Afganistán, y para los estadounidenses que han luchado y servido en el país. Esto es profundamente, profundamente personal. También lo es para mí ", concluyó.

 

Un análisis de la situación

 

Por su parte, la Doctora en historia y especialista en estudios de los Estados Unidos, Valeria Carbone, explicó que el conflicto en territorio afgano data desde hace 20 años, cuando a partir de la denominada “Doctrina Bush” -establecida luego de los ataques de septiembre de 2001-, la coalición entre Inglaterra, Canadá, Australia y la OTAN liderada por los EE.UU. lograron la retirada de los talibán hacia la frontera.

“En el año 2010, con Barack Obama se empezó a hablar de la retirada de los EE.UU. de Afganistán, y en el año 2020 el gobierno de Trump firmó un acuerdo con los talibán para la retirada el 1 de mayo de este año, es un proceso que ya se venía gestando”, historizó en Las últimas noticias.

Carbone también señaló que una de las cuestiones que es necesario revisar es por qué la retirada estadounidense se produce con una década de retraso: “Muchos analistas se preguntan porqué si el objetivo de desmantelar al terrorismo se había cumplido hace diez años, cuando los talibanes estaban en su momento de poder más bajo, Estados Unidos no lo hizo”, apuntó.

Por último, la especialista indicó que otra de las incógnitas es analizar cómo, luego de veinte años de presencia aliada en el país, los talibán lograron ocupar rápidamente la capital afgana, Kabul.

“Ellos sabían que esto iba a pasar, pero no pensaron que iba a ser tan rápido. Entonces, hay que preguntarse qué es lo que está pasando en terreno que los talibán, aun con la presencia de tropas aliadas en territorio, entraron en la capital afgana en menos de tres semanas sin casi oposición alguna, incluso de las fuerzas entrenadas por la coalición internacional”.