El gobierno de Alberto Fernández está cerca de cerrar un nuevo acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), aunque continúa las conversaciones y buscará incluir sus resultados en el Presupuesto 2022 que ya se está elaborando y deberá presentarse en septiembre. El trato no sólo marcará un antes y un después en la política económica sino que dará una señal de fortaleza al mercado y un guiño político de gestión, en un año signado por el calendario electoral.
En este contexto, el ministro de Economía, Martín Guzmán, irá este jueves al Congreso a reunirse con los legisladores de la Comisión Bicameral Permanente de Seguimiento y Control de la Gestión de Contratación y de Pago de la Deuda Exterior de la Nación para dar detalles de los diálogos con el Fondo. La comisión está compuesta por 10 diputados y 10 senadores, la mayoría del Frente de Todos.
Fuentes parlamentarias agregaron que además de describir los avances en la relación con el FMI, el ministro también brindará detalles sobre la llegada y el uso de los Derechos Especiales de Giro (DEG), equivalentes a 4355 millones de dólares, enviados por el organismo multilateral a la Argentina en el marco del reparto de activos que hizo entre sus socios.
Las claves del acuerdo con el FMI
Este jueves se cumple un año desde que se iniciaron las conversaciones para renegociar el acuerdo con el Fondo que dejó una deuda de más de 44.000 millones de dólares que tomó Mauricio Macri con un crédito stand by. Ahora, según publicó Página/12, rumores mencionan que simplemente restan definir detalles pequeños antes de la firma.
Guzmán adelantó en una entrevista de esta semana que su equipo está "trabajando en nuevas líneas de crédito con plazos distintos" a los programas que ofrece el FMI ya que estos son "añejos" y "no se adaptan al mundo" actual. "Lo importante es que el acuerdo sea sano, que nos permita redefinir nuestros compromisos con el mundo de una forma sostenible", advirtió.
En todos los posibles escenarios, el Gobierno se encuentra más "robusto" luego de recibir los DEG, que se utilizan para engrosar las reservas internacionales y hacer frente a los próximos vencimientos de deuda. En el mercado son optimistas y creen que parte de los millones podrán "ahorrarse" y utilizarse como recursos para acompañar la economía.
Si bien aún no hay información oficial, algunos detalles del pacto ya se conocen:
- Será un acuerdo de Facilidades Extendidas: a diferencia del stand by, da más tiempo a pagar la deuda.
- Se busca un plazo de repago a 10 años para la devolución total del préstamo con cuatro años de gracia. Es decir, comenzaría pagarse en 2026
- Condiciones: si bien no trascendieron las exigencias específicas para Argentina, los acuerdos de Facilidades Extendidas implican un seguimiento cercado del organismo a los "problemas estructurales" del país, a través de reformas económicas como jubilatorias, laborales y fiscales.