El Ministerio de Trabajo dictó ayer la conciliación obligatoria, pedida por la UOM, por el conflicto laboral en los talleres ferroviarios Rioro en Pérez. A partir de la medida, que se prolongará hasta el 14 de julio, los 71 operarios despedidos el pasado jueves reingresarán a sus puestos de trabajo. Aunque las perspectivas no son las más favorables, tanto la provincia como el gremio tendrán algo más de tiempo para continuar evaluando alternativas.
Al enviar los telegramas; la empresa Emepa, controladora de Rioro, argumentó que cerraba las puertas por la baja de la actividad y porque desde Nación decidieron no renovarle los contratos para la reparación de vagones y locomotoras. Por eso, la UOM pidió que en la próxima audiencia, convocada para el lunes, comparezcan funcionarios del gobierno nacional.