Luiz Inácio Lula da Silva acusó al presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, de "estimular la división, el odio y la violencia" al incentivar las manifestaciones convocadas por la ultraderecha para reclamar la intervención en el Supremo Tribunal Federal, que investiga al Gobierno por montar redes de financiamiento de acciones golpistas.

"En lugar de sumar, Bolsonaro estimula la división, el odio y la violencia", puntualizó Lula en un pronunciamiento al país en virtud del 199 aniversario de la independencia brasileña. Luego, el expresidente repudió el plan económico de actual jefe de estado y cuestionó su forma de gobernar.

https://twitter.com/LulaOficial/status/1435010124620435462

"El papel de un presidente es mantener encendida la confianza en el presente y en el futuro, mostrar que es posible superar los obstáculos. Un presidente tiene que saber sumar fuerzas y gobernar con este sentimiento permanente, porque de ahí viene el ejemplo para el país", señaló el líder del Partido de los Trabajadores.

El exmandatario que gobernó entre 2003 y 2010 lidera las encuestas para vencer en todos los escenarios a Bolsonaro en 2022. Esta situación es considerada como uno de los principales motivos de la radicalización del actual presidente.

Miedo en Brasil

En comunicación con La García, el diputado brasileño Júlio Delgado dijo "estar muy preocupado" por la situación de Brasil.

“Lo que puede pasar hoy es una ruptura de la Democracia en Brasil”, indicó el legislador. “Hoy en vez de ser un día de celebración es un día de aprehensión. Los movimientos de la madrugada y noche son preocupantes, principalmente lo que ha sucedido en las cercanía de las embajadas de Rusia y China”, agregó.

Delgado contó que las Fuerzas de Seguridad habían cerrado algunas calles de Brasilia pero dijo que ese bloqueo fue levantado por maquinarias agrícolas y grandes camiones de los simpatizantes de Bolsonaro. "Hay peligro de que haya una invasión del Congreso, como ha pasado en el Capitolio de los Estados Unidos”, completó.

La policía de Brasilia cedió al pedido de los manifestantes y dejó pasar a los manifestantes bolsonaristas, que piden el cierre de la Corte Suprema y tienen como blanco de sus críticas, sobre todo, al juez supremo Alexandre de Moraes, encargado de una causa sobre atentados al estado de derecho.

Bolsonaro sobrevoló en el helicóptero oficial los campamentos en las afueras de Brasilia que organizaron sus seguidores. Asimismo, el Presidente sostuvo que la manifestación es a favor de la "libertad de expresión".