La historiadora Araceli Bellota explicó cuáles fueron los orígenes de los planes sociales y cómo incidieron en la vida de la ciudadanía argentina.
En su columna en Una Nueva Aventura, Bellota explicó que, si bien a los beneficiarios de planes sociales se los estigmatiza, éstos "son consecuencia de las políticas neoliberales implementadas a partir de la dictadura cívico-militar del 76, la cual destruyó fuentes de trabajo y el modelo industrial".
Uno de los planes fue las Cajas Pan, que "se implementó por una ley del Congreso y se estableció que esa ayuda se iba a mantener solamente por dos años, que era el tiempo en el que se pensaba que iba a terminar la extrema pobreza. Pero la verdad es que se mantuvieron hasta el final del gobierno de Alfonsín", señaló.
En 1989, en el gobierno de Carlos Menem, se implementó el Bono Solidario, que lo distribuía la CGT y servía para canjear por alimentos y prendas de vestir.
"En el 95, Menem lanzó el Plan Trabajar, que reemplazó ese bono. Alcanzó a 350 mil personas, y siempre diciendo que los planes eran coyunturales, que se iba a resolver cuando la economía reformada tuviera la capacidad para generar puestos de trabajo", recordó la historiadora.
"Dos años después, en el 97, el Plan Trabajar atendía 700.000 personas. Para entonces, esa cantidad de desocupados en distintos puntos del país se comenzaron a organizar y así surgieron las organizaciones de piqueteros, que no fueron más que la forma que esos desocupados encontraron para hacer notar su reclamo", sostuvo.