Desde hace meses, el río Paraná atraviesa "una bajante extraordinaria" y los expertos ya advierten que en los próximos meses podrían acercarse a los valores históricos de 1944. Si bien produjo consecuencias en el transporte fluvial y por ende también pérdidas millonarias por las exportaciones, hay preocupación por el abastecimiento de agua y la caída en la producción eléctrica.
Se trata de un tema que tiene en vilo a la región: por un lado, porque el Paraná permite la navegación continua entre puertos de Argentina, Brasil, Bolivia, Paraguay y Uruguay. En el caso de la Argentina, desde ese río se exporta la mayor parte de la cosecha de granos.
Si bien el río sigue permanece "transitable", el descenso del caudal obligó a los enormes barcos que llevan los granos a limitar su capacidad de carga, lo que encareció los costos del transporte.
La Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) estimó que "por la bajante, en lo que va del 2021, Argentina ya perdió 620 millones de dólares en exportaciones de harina y aceite de soja", mientras que desde Paraguay, el director del Centro de Armadores Fluviales y Marítimos del Paraguay, Juan Carlos Muñoz.
Caída en la producción eléctrica
Además, la bajante generó una caída del 15% en la producción eléctrica con respecto a 2020, y un 35% respecto a 2016, cuando se alcanzó la máxima generación, ya que sobre el río hay decenas de represas.
Por su parte, la Entidad Binacional Yacyretá (EBY), que administra la central hidroeléctrica río abajo de Itaipú, informó que están operando 15 de sus 20 turbinas, pero que "se genera solo el 40% de la potencia instalada en la central". En comparación a 2019, la caída en la generación de energía es del 28%.
Cruces ilegales por las fronteras
Por el descenso de las aguas del Río Paraná, y ante la imposibilidad de utilizar los pasos fronterizos entre Argentina y Paraguay debido a las restricciones por el Covid, muchas personas aprovecharon la bajante para cruzar ilegalmente entre ambos países.
Según un informe del diario paraguayo Última Hora, "la mayoría de estas personas que cruzan son generalmente paraguayos residentes en el vecino país que vienen a visitar a sus familiares y argentinos que hacen lo mismo".
Ese medio, detalló que el cruce ilegal es usado además para traficar mercadería, no solo desde Argentina sino también desde Brasil. Fuentes de la Asociación de Avicultores del Paraguay (Avipar) estimaron que cada mes ingresan ilegalmente unos 2 millones de kilos de pollo, el 80% desde Argentina y el 20% desde Brasil.
Las razones de la bajante del río Paraná
Entre las principales causas de la bajante, se encuentra la escasez de lluvias y el cambio climático relacionado con las actividades humanas, la deforestación, la reducción de infiltración por prácticas agrícolas inadecuadas y la exageración de las canalización que aceleran mucho el agua, la misma sale de golpe, pero vacían los almacenamientos.