El fin de semana se viralizó un video en el que el presidente Alberto Fernández sostiene que Córdoba tiene que "integrarse" al país y que la provincia es un "terreno hostil". De hecho, el video fue recortado de manera que no se escucha que el mandatario dice todo lo contrario.
El miércoles de la semana pasada, el presidente Alberto Fernández tuvo una reunión en el Centro Cultural Kirchner en el que participaron, entre otros, dirigentes del Frente de Todos cordobés encabezados por el senador Carlos Caserio, a quien se lo ve al lado del candidato a diputado nacional Martín Gill, también actual secretario de Obras Públicas.
En este marco, se grabó un video informal que se viralizó con un recorte tendencioso, en el cual se puede escuchar al mandatario decir, por ejemplo, "Hacen falta muchos cordobeses y cordobesas como ustedes para que Córdoba de una vez por todas se integre al país".
El mismo senador Caserio salió a desmentir esta presunta "discriminación" de parte de Fernández hacia la provincia, a través de Twitter: "Basta de mentiras. El gobierno nacional nunca discriminó a Córdoba. Acá pueden ver el video completo, sin recortes mal intencionados, de las palabras del presidente", posteó.
En el mismo sentido, la Portavoz presidencial, Gabriela Cerruti, sostuvo que "el presidente Alberto Fernández no sólo no dijo lo que le intentan hacer decir, sino que dijo todo lo contrario. Sostuvo que Córdoba nunca ha sido discriminada durante este gobierno y que espera que se integre, como todas las provincias, a la senda de crecimiento de la Argentina".
En el video completo se puede apreciar que el presidente Alberto Fernández explica que tiene diferencias con el gobernador cordobés, Juan Schiaretti, pero aún así nunca relegó las necesidades de Córdoba.
Por otro lado, se encargó de dejar en claro que el expresidente Mauricio Macri es el responsable de la actual situación del país: “No comparto lo que piensa el gobernador de Córdoba, yo no choqué la Argentina sino los amigos de él. Lo que hago junto a todos ustedes es tratar de poner de pie la Argentina que estaba arrodillada, claudicante y destruida. Y cuesta, porque esa Argentina que recibimos además se enfermó con la pandemia”.