El Papa Francisco se refirió este jueves a la crisis climática al manifestar que “el tiempo se agota” para abordar la problemática global, en una carta enviada a referentes católicos de Escocia.
"Como saben, esperaba asistir a la COP26 en Glasgow y pasar un tiempo, aunque sea breve, con ustedes. Lamento que esto no haya sido posible", comenzó escribiendo el Sumo Pontífice en la misiva publicada este jueves en el Boletín Oficial vaticano, un día antes de que concluya la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático.
“Me complace que se unan a ustedes en oración por mis intenciones y por el resultado fructífero de esta reunión destinada a abordar uno de los grandes problemas morales de nuestro tiempo: la preservación de la creación de Dios, que se nos ha dado como un jardín para ser cultivado y como un hogar común para nuestra familia humana”, remarcó Jorge Bergoglio.
El jefe de la Iglesia Católica insistió en “rogar los dones de sabiduría y fuerza de Dios a quienes tienen la misión de guiar a la comunidad internacional en su búsqueda de afrontar este grave desafío con decisiones concretas inspiradas en la responsabilidad hacia las generaciones presentes y futuras. El tiempo se agota; esta ocasión no debe desperdiciarse, no sea que tengamos que enfrentar el juicio de Dios por nuestra falta de ser administradores fieles del mundo que él ha confiado a nuestro cuidado”.
“Os saludo a cada uno de corazón y os aseguro mis oraciones por vosotros y sus familias, para los jóvenes, los ancianos, los enfermos y los que de alguna manera están sufriendo los efectos de la pandemia”, explicó Francisco.
Por último, pidió “de manera particular, que oren por mí y por mis hermanos obispos en esta fiesta de nuestra comunión al servicio del Evangelio y la edificación de la unidad de la Iglesia. En estos tiempos difíciles, que todos los seguidores de Cristo en Escocia renueven su compromiso de ser testigos convincentes de la alegría del Evangelio y de su poder de dar luz y esperanza a todo esfuerzo por construir un futuro de justicia, fraternidad y prosperidad, tanto material como espiritual”.
