En lo que va de la semana ya ocurrieron tres tiroteos iniciados por efectivos de la Policía de la Ciudad de Buenos Aires en las calles de la Capital Federal. Se trata de casi una balacera por día, sin respuesta de parte de los perseguidos o interceptados por los efectivosa, y en dos de los episodios hubo heridos. En el último, de esta mañana, un adolescente de 17 años está en grave estado y peligra su vida.
Persecución en Boedo
Dos delincuentes fueron detenidos este martes por la mañana en el barrio porteño de Boedo, en el marco de una persecución policial que empezó en Almagro y que también incluyó disparos en la zona, luego de que el conductor de un auto evadiera un control policial.
La versión de la Policía asegura que el episodio se originó a las 6 de la mañana en la avenida Boedo y la calle Agrelo, en Almagro. Allí, un efectivo de la Comisaría Vecinal 5 A de la Policía de la Ciudad observó a un vehículo marca Ford Escort y, al querer identificar a los ocupantes, el conductor se negó, intentó embestirlo y luego escapó.
El agente comenzó a seguir el vehículo en su auto particular. Luego se sumaron a la persecución un suboficial mayor retirado de la PFA y dos efectivos más. Al llegar al cruce de Boedo y la avenida San Juan, los policías le dispararon a las ruedas del Escort, logrando que se detenga en Boedo y Cochabamba. Ni los policías ni los dos detenidos resultaron heridos.
Gatillo fácil en Barracas
El miércoles por la noche en el barrio de Barracas cuatro adolescentes fueron atacados violentamente por efectivos de la fuerza porteña que se encontraban de civil. Uno de los cuatro jóvenes, Lucas González, recibió un disparo en la cabeza y se encuentra en gravísimo estado internado en el Hospital El Cruce, de Florencio Varela.
La madre denunció este jueves que se trató de un caso de gatillo fácil y en declaraciones a Radio con Vos aseguró que “el daño es irreversible” y que su hijo “necesita un milagro”. La versión policial es que los jóvenes resultaban "sospechosos" y, como suele suceder en estos casos, mencionaron un intercambio de disparos. Luego, indicaron que en el interior del auto hallaron una réplica de un arma.
Familiares y amigos de los adolescentes de 17 años contaron que cuando comenzaron a ser perseguidos por los policías se asustaron porque pensaron que se trataba de un intento de robo. Por eso, dos salieron corriendo del Volkswagen Suran y otros dos quedaron en el vehículo, que fue baleado por los policías.
11 balas para un agresor con un cuchillo y un herido que pasaba por el lugar
Dos personas resultaron heridas de bala en la tarde de este miércoles luego de que la Policía disparara 11 veces para frenar un ataque con cuchillo. El episodio se desató luego de que uno de los damnificados intentó atacar con una navaja a un efectivo, en la Plaza Garay, ubicada entre las calles Pavón, Solís, Juan de Garay y presidente Luis Sáenz Peña.
El uniformado abrió fuego y dos policías más llegaron en apoyo. El hombre, entonces, intentó agredir a uno de los agentes de seguridad, el cual efectuó al menos once disparos con su arma reglamentaria, según se observa por el video captado por un testigo desde su teléfono celular.
Dos tiros impactaron contra el agresor, quien fue trasladado de urgencia por una ambulancia del servicio de emergencia SAME a un hospital de la zona. Una tercera bala dio en el brazo de un vecino que pasaba por el lugar. Ambos están fuera de peligro.